Antoine Griezmann es uno de los jugadores emblema de LaLiga EA Sports, lo que viene a ser la primera división de la liga española de fútbol. Con un palmarés envidiable, entre ellos una copa del Mundo, será recordado como uno de los jugadores franceses más importantes de la liga española en los últimos años.
Tras sus tres tantos anotados ayer en la victoria del Atlético de Madrid ante el Celta en Balaídos, el jugador francés suma ya siete goles en nueve jornadas. El club rojiblanco, que está a tan sólo tres puntos del liderato de la liga, se ha llevado la victoria en muchos partidos gracias a los tantos del gallo francés. Goles que han valido tres puntos en muchas de las citas ligueras. Incluso en la UEFA Champions League, anotando en la victoria ante el Feyenoord, donde lleva dos goles en dos partidos.
Está claro que el francés está dentro del selecto grupo de los mejores jugadores de la historia del equipo rojiblanco. Ya lo era cuando emigró a Barcelona, donde tuvo destellos de lo que podía haber sido. Pero donde no consiguió igualar el nivel que había demostrado en el conjunto colchonero. A pesar de ello, desde su vuelta ha demostrado ser un jugador más maduro y, junto con Morata y compañía, echarse a todo un Atlético de Madrid a la espalda y volver a su mejor nivel.
Tras el encuentro de ayer, Griezmann aseguraba que él no se va a mover del Atlético de Madrid y que uno de sus principales objetivos, a pesar de ganar títulos, era superar el récord y convertirse en el máximo anotador de la historia del club. «Intentaré batir esa cifra», reconoció Antoine. El francés es el tercer máximo goleador y está a tan sólo 15 tantos de alcanzar el récord que, actualmente, posee el «Sabio de Hortaleza», Luis Aragonés con 172 goles.