Juventus e Inter de Milán han empatado a uno, en la decimotercera jornada de la Serie A. En un partido muy equilibrado, que fue claramente de más a menos, y en el que primó el miedo a perder.
Los dos equipos salieron a por la victoria sin titubeos
Con el pitido inicial, tuvo lugar una batalla de esgrima sobre el verde del Allianz Stadium. Donde los nerazzurri llevaron la iniciativa, pero los bianconeri estaban ofreciendo resistencia. El escenario era de respeto, prudencia y con ello, mucho tanteo antes de probar a dar un golpe definitivo. Ambos equipos plantaron sus líneas en un bloque medio sin estorbar demasiado la salida del contrario, que en algunos casos estaba teniendo lugar en largo. Mientras que en fase ofensiva, el equipo de Inzaghi elaboraba sus jugadas pausadamente, hasta encontrar la opción de pase en largo que le permitiese verticalizar. Así como los locales optaban por ser directos, empezando la jugada o reiniciando en largo. En busca de un apoyo que extendiese la jugada hacia los costados, para progresar y buscar el centro.
Tras el primer cuarto de hora, las propuestas se afianzaron y las ofensivas se redujeron por parte de ambos conjuntos. Tras el tanteo inicial, donde la Juventus llevó más peligro, aunque el Inter insistió más y con mayor variedad. Vlahovic abrió la lata para la vecchia signora. En una acción donde robó la pelota cerca del círculo central, se apoyó en Chiesa y este recorrió el camino hasta la frontal del área para asistirle con un centro raso.
Después del 1-0, el duelo tuvo varios minutos de interrupciones y agitación, en lo que estaba siendo una reacción visceral del cuadro de Simone Inzaghi. Una respuesta que alcanzó su punto álgido en una fantástica jugada, canónica de lo que es salir jugando desde atrás verticalmente. Se inició en Sommer, pasó por Dumfries, Barella y permitió a Marcus Thuram servirle un centro raso desde la derecha a Lautaro, que no dudó en enviar la pelota a la red. Con el empate, la escuadra milanesa ofreció sus mejores minutos de juego. Acaparó el esférico durante varios minutos y arrinconó a su oponente contra su portería. Demostrando una gran autoridad en sus circulaciones.
La prudencia se abrió paso conforme se acercaba el final
Los segundos 45 minutos empezaron con un notorio control del juego por parte del cuadro interista. Que por deseo de los locales debió de llevar la iniciativa y acumular mayores porcentajes de posesión. Pero pese a esta circunstancia, estaba consiguiendo minimizar cualquier amenaza defensiva después de una pérdida. Mientras que el equipo juventino, por su parte, abogaba por replegarse en campo propio e instalar la línea defensiva en área propia. Sin embargo, no dudaba en perseguir al poseedor en el inicio de la jugada, para provocar algún error que le permitiese contraatacar sin exponerse.
Con el paso de los minutos, el Inter persistió en seguir dominando a través de la pelota. Para provocar un error en su oponente, que le permitiese inclinar la balanza de su lado. En contraste, la Juventus dio entrada a Locatelli por Caviglia. Quien se había vaciando en los marcajes, realizando una labor poco vistosa en fase defensiva. Con la introducción del ex del Sassuolo, los locales dieron un paso hacia delante, tanto literal como figurado. Pues el centrocampista les permitió estirar sus secuencias de pases y cortar el ritmo de juego de su adversario. Gracias a esta labor, los de Maximiliano Allegri menoscabaron el protagonismo de los visitantes en el juego e inclinaron el campo sobre el área de Sommer, con llegadas muy tímidas.
En los últimos instantes, ambas escuadras ultimaron sus posibilidades de buscar el gol de la victoria. Atacaron un bloque totalmente replegado con secuencias de pases muy prudentes, que se focalizaban sobre las bandas y apenas tenían profundidad. El equipo de Inzaghi alcanzó una mayor constancia en la búsqueda del área contraria, pero la precipitación y el abigarrado bloque defensivo bianconeri imposibilitaban cualquier actividad con el esférico en los últimos 15 metros.
Con este empate, el Inter conserva el liderato de la Serie A, con 32 puntos. En su próximo compromiso visitará al Benfica, en la fase de grupos de la Champions League. Mientras que la Juventus permanece en segunda posición, con 30 puntos. En la próxima jornada de liga, visitará al Monza.