Hoy el Racing de Ferrol se ha tenido que enfrentar en la cuarta jornada de LaLiga Hypermotion a un gran Mirandés. Se ha podido ver la igualdad de ambos equipos donde el buen juego ha estado presente en todas y cada una de las jugadas.
PRIMERA PARTE
La primera mitad del encuentro entre el Racing de Ferrol y el Mirandés se puede definir como un juego de estrategia. Ambos equipos han preferido mantener el control del balón para de esta manera poder buscar la mejor opción para el ataque.
Aún así estas situaciones ofensivas no han sido muy numerosas, ya que tan solo se han realizado nueve disparos, siendo cuatro de ellos entre los tres palos. El colegiado no tardó mucho en enseñar la primera tarjeta amarilla del partido, y es que, en el minuto 15 Lachuer la vió tras golpear a álvaro Sanz.
Esta amarilla pudo ser un punto de inflexión para los burgaleses, ya que con ella se observó una muestra de iniciativa en cuanto a querer conseguir el primer tanto. Las acciones ofensivas del Mirandés aumentaron notablemente pero los gallegos supieron frenarlas, la posesión del balón sigue siendo para los de Miranda.
Más tarde Bebé en el minuto 23 realizó su primer intento de disparo, el cual fue atajado por el guardameta Raúl Fernández. La respuesta de Panichelli no se retrasó en demasía, ya que en el minuto 25 realizó otro remate que se marchó muy lejos de la portería.
Como resultado del juego intenso del Mirandés el defensor Puric recibió la primera tarjeta de su equipo. El jugador tuvo salir que su zona de influencia, y como resultado tras perder su posición debió de parar la progresión de Gorrotxategi.
El partido siguió con la misma dinámica, y en el minuto 45 Ruiz salvó a su equipo. La gran jugada del futbolista Juan Gutiérrez que fue capaz de entrar dentro del área y llevar a cabo un remate que con tan mala suerte chocó en Puric. Dicho balón llevaba camino del gol, pero gracias a la intervención de Jesús Ruiz el tanto no subió al marcador.
Con todo ello llegamos al descanso con un empate a cero en el luminoso donde los equipos han preferido mantener la tranquilidad y no encajar ningún gol. La ineficacia en cuanto a portería está inquietando a los aficionados ya que cualquier acción puede determinar el partido.
SEGUNDA PARTE
Una vez comenzada la segunda mitad, la primera ocasión de ataque la tuvo el Mirandés, pero Naldo supo parar a Panichelli. El defensor realizó una buena acción defensiva que más tarde se vio la cara con Joel Roca, el cual intenta en la disputa dentro del área al intentar engañar al colegiado tirándose al suelo. Como resultado el delantero recibió su primera tarjeta amarilla.
Se ha podido ver que los entrenadores se han dirigido a sus futbolistas puesto que ambos equipos querían llevarse los tres puntos. Como resultado, fruto de esa motivación, el atacante Bebé desencadena una acción peligrosa la cual fue frenada por Juan Gutiérrez (éste último se lleva una cartulina amarilla). A su vez su compañero Pablo Tomeo también es amonestado por protestar al árbitro sin ser el capitán de su equipo.
Sobre el minuto 58 llega el primer cambio del partido, en este caso se marchó Joel Roca y entró Urko Izeta. Los gallegos también moverán su banquillo10 minutos mástarde, en este caso con una doble sustitución. Los jugadores que entran para el Racing de Ferrol son Álvaro Giménez y Christian Borrego.
El futbolista del conjunto gallego, Naldo, pudo hacerle un roto a su equipo, tras cometer un grave error que solventa Álvaro Sanz y que no pudo aprovechar Panichelli. El partido de esta cuarta jornada de LaLiga hypermotion se animó en esta segunda parte, ya que las ocasiones de gol comenzaron a sucederse con mayor claridad.
Fruto de ello el técnico del Mirandés realizó un triple cambio entre sus filas con el fin de poder cambiar las cosas y poder generar más peligro. Pero sucede todo lo contrario, ya que el Racing aumentó su contundencia en cuanto al juego se refiere y encerró a su rival en su propio campo.
La posesión pasó a formar parte del equipo gallego, pero el gol no llega a subir en el electrónico. El partido se revolucionó, y el Mirandés quería bajarle el ritmo pero no lo consiguió. La energía de ambos equipos está en el límite. Con todos los cambios realizados por los dos entrenadores todo estaba determinado a que se llevará a cabo una jugada puntual que decidiera el resultado, pero no fue así.
El encuentro llega al minuto 90 con empate a cero, y aunque el árbitro haya añadido 4 minutos extra, el marcador no se movería hasta el pitido final. Reparto de puntos en un partido muy igualado donde los equipos buscaban sacar algo más.