Todos los clubes que forman parte de la élite del fútbol tienen como único objetivo crecer en este mundo, ya que siempre existe la necesidad de vender para crecer.
El Real Betis Balompié busca esto y la directiva de la entidad es consciente de ello. Por esto, pretenden acabar con la deuda y judicialización del club, aumentar su patrimonio, estabilizar su balance de gastos e ingresos, disparar la proyección de la marca o vincular la progresión institucional con la deportiva.
Además, la no participación en competiciones europeas genera un contexto adecuado para que se escuchen ofertas por sus mejores activos. Uno de los nombres que más suenan en este aspecto es el de Nabil Fekir.
El mediocentro podría encontrarse en cualquier posición para equilibrar el puesto, aunque según ha podido saber Estadio Deportivo, el interesado no se encuentra por la labor. El mismo jugador y el entorno que le rodea manifiesta la suerte que ha tenido de llegar a una “auténtica familia”, valorando la confianza en su calidad, el cariño por parte de la afición y el guiño para “crecer juntos” de un club con el que están “encantados”.
Sin embargo, se siente, en parte, culpable del mal trago por no meterse en Europa League, aunque le gustaría compensarlo en la próxima temporada. Tampoco es probable que abandone al club verdiblanco salvo que se produzca un gran giro de los acontecimientos o por una necesidad de la entidad.
Han llegado a ser tres propuestas las desechada por su familia, que lleva sus derechos desde hace menos de un año. Todas ellas mejorarían su sueldo y le brindarían la opción de jugar competiciones europeas.
A pesar del interés por parte de otros clubes, Fekir ha admitido que no quiere abandonar el club y pretende seguir entrenando con sus compañeros de cara a los próximos partidos en esta temporada.