El mítico delantero verdiblanco, Ricardo Oliveira, fue un jugador que gracias a su calidad y olfato goleador llevó al Betis a sus mayores éxitos en este siglo.
Durante su estancia en el club, el equipo de La Palmera ganó la Copa del Rey de 2005 y cosechó la clasificación para la Champions League. Unos años donde todo salía y el Real Betis se convirtió en un rival duro de roer.
Lorenzo Serra Ferrer fue el entrenador que más huella dejó en el brasileño, ya que gracias a él consiguió explotar al máximo sus prestaciones futbolísticas conviertiéndose en un ariete muy temido por los porteros.
Como muestra de recuerdo y agradecimiento, Oliveira ha publicado en Instagram diversas fotos con los recuerdos más emocionantes que vivió en el club verdiblanco, acompañado de un apasionante mensaje hacia el entrenador que le llevó al estrellato: «Honor a quien honor merece. Soñar con el éxito es bueno, pero realizarlo depende del saber luchar por este sentimiento».
También mencionó en la publicación a sus excompañeros Denilson, Edu y Marcos Assunçao otros de los grandes históricos del club, que junto a Oliveira llevaron al beticismo en volandas.
Finalmente, añadió el apasionante y sonoro himno verdiblanco, aquel que retumba toda Sevilla cuando el Betis juega en el Villamarín.
El ariete carioca, a pesar de su corta estancia en el club, anotó 39 goles en 76 partidos disputados. «Suena samba brasileña, con los goles de Oliveira», gritaba el mítico exspeaker del Betis, Manolo Melade, cada vez Ricardo Oliveira saltaba al terreno de juego.
Un tigre de cara a puerta que a sus 40 años sigue jugando y dejando sus clásicas muestras de calidad.