Tras tres temporadas en segunda y alguna que otra lesión, Raúl Guti, centrocampista del Real Zaragoza, parece haber dado el salto definitivo para jugar en primera la temporada que entra. Jugador trabajador a la par que creador, ha sido clave en el sistema de Víctor Fernández y parece estar preparado para el salto a primera. Sea en el Real Betis o en cualquier otro equipo.
Con 1,78 de altura, 23 años y un futuro prometedor por delante, Raúl Guti ha conseguido dar a su equipo cinco goles y cuatro asistencias en 41 partidos.
Si hablamos de Raúl Guti hablamos de orden y de corrección. Es un jugador al que nivel técnico le sobra. Pieza perfecta para marcar los tiempos y jugar de cara, aunque no tiene problema en girarse, conducir y hacer avanzar a su equipo.
Este año ha sabido cumplir perfectamente los dos roles principales exigidos por su entrenador. El Zaragoza ha jugado con un 4-4-2 que, dependiendo de la situación, podía plantearse en rombo o en línea. Jugando en línea, Raúl Guti acompañaba a Íñigo Eguaras en el doble pivote, mientras que en rombo, juega por el sector derecho como interior. Sea en la posición que sea, es un futbolista que le gusta acudir a recibir a la base de la jugada para salir desde atrás. Cuando su equipo sale a la contra es el jugador al que le gusta llevar a cabo esa conducción rápida y acabar abriendo. A la hora de tirar no le tiemblan las piernas tampoco. En tareas defensivas es un jugador que te aporta mucho trabajo y que tiene una gran capacidad de sacrificio.
De cualquier manera, lo que parece claro es que a Guti se le queda corta la Segunda División y que está listo para dar el salto. Veremos cuál será su destino final, pero parece que su etapa en el cuadro maño llega a su fin.