El mediocampista defensivo del Real Madrid, Casemiro, sigue demostrando su importancia en los éxitos del conjunto blanco a base de grandes actuaciones y logros individuales.
El brasileño se ha convertido en el líder de recuperaciones de la temporada 2020-21 con 294 recuperaciones por encima de nombres propios como Mikel Merino (Real Sociedad) con 289 y Pervis Estupiñán (Osasuna) con 275. Los números hablan por sí solos con 294 robos de balón en 35 encuentros con un promedio de 8,4 recuperaciones por partido lidera este apartado. Unos números que hablan por sí solos y que destacan una cualidad fundamental del centrocampista madridista, la regularidad.
Y es que el brasileño de 28 años sigue en la élite del fútbol mundial y sus actuaciones a nivel defensivo permitió al Real Madrid conseguir grandes triunfos como las tres Champions seguidas (2016, 2017 y 2018) y otros títulos a nivel doméstico y continental. Es el futbolista que ancla la defensa con el ataque con su aporte físico. Gracias a su trabajo físico y mentalidad defensiva ha ayudado a liberar a jugadores imprescindibles en la creación de juego como Toni Kroos y Luka Modric del esfuerzo defensivo.
Si bien es cierto que su agresividad en la tarea defensiva ha dejado muchas veces a la escuadra madridista en vilo, hay que destacar que ha conseguido ser clave en duelos de gran importancia. Por ejemplo en la final de Champions de la temporada 2016/2017 en la que anotó un tanto ante la Juventus o su gol frente el Manchester United en la Supercopa de Europa de 2017.
Zinedine Zidane consiguió sacar el máximo rendimiento a un futbolista que no destacó en su juventud por su calidad técnica. El técnico francés encontró el rol adecuado para Casemiro que le ha permitido convertirse en unos de los mejores centrocampistas defensivos de la última década.