Tras el parón de selecciones, el Madrid Femenino volvía al torneo local para enfrentarse con el Deportivo Alavés, en el marco de la Jornada 27. El objetivo primario era olvidarse de la pasada y sorpresiva derrota contra el Huelva, que significó un frenazo en su escalada en la tabla. Desde la llegada de Alberto Toril, solo habían perdido los encuentros contra el Barcelona. Toda una gesta, si se tiene en cuenta que, en el arranque del campeonato, cosecharon un empate y cuatro derrotas, antes de su primer triunfo. Por si esto fuera poco, ese desastroso inicio les dejó con apenas cuatro puntos de veintiún posibles en sus primeras siete jornadas.
A pesar del tropiezo mencionado, de la fecha anterior, no cabía duda de que la cara del equipo es muy diferente hoy en día. Y es ahí donde entraba el segundo objetivo que no era otro que retomar la senda de la victoria para alcanzar los puestos europeos. A falta de cinco ‘finales’ y con dos partidos menos que el Tenerife, ocupante del tercer puesto, la distancia con las canarias era de seis puntos. Perder o empatar no eran opciones, pues necesitaban sumar de a tres. El equipo viajó a Vitoria, concretamente a la Ciudad Deportiva José Luis Compañón, para enfrentarse a las habitantes del noveno puesto de la tabla. Las albiazules, con la permanencia ya garantizada, presentaban cuatro derrotas y una victoria en sus últimas cinco apariciones, mientras que las merengues, tres triunfos y dos partidos perdidos.
Toril armó una convocatoria con 20 jugadoras, y las mismas ausencias de las últimas fechas, es decir, Kaci y Cardona. A ellas se sumó Sofie Svava, que vio doble tarjeta amarilla en el encuentro anterior. Por otro lado, las canteranas Paula Partido y Carla Camacho, de reciente convocatoria con la Sub-17, fueron incluidas en la lista. A partir de ahí, su once inicial quedó conformado por: Misa, Lucía, Ivana, Rocío, Olga, Teresa, Zornoza, Oroz, Asllani, Esther y Athenea. En la otra vereda, el Alavés, dirigido por Mikel Crespo, presentó una lista de 20 jugadoras, de donde sacó una alineación con: Jana, Majarín, Ohale, Miren, Alba, Carla, Garazi, Miriam, Chamorro, Auñon y Miku.
El Alavés sacó el esférico del centro del campo, para dar inicio al encuentro, aunque muy pronto el Madrid se hizo con él. Al 3’, Asllani logró forzar el primer saque de esquina, a cargo de Zornoza, tal y como es habitual en los balones parados para perfil zurdo. El cobro no trajo consecuencias, pero las merengues se quedaban en campo contrario producto de la presión alta ejercida desde el comienzo. En el 7’, un nuevo córner, en jugada preparada iniciada por Teresa, trajo la primera acción de peligro real a cargo de un remate de cabeza de Esther que Jana lograba despejar.
Lucía lo intentaba, en el 10’, con un remate desde afuera, bien controlado por la guardameta de las Gloriosas. El dominio del Real Madrid era avasallante y muy poco le duraba el balón a las blanquiazules. Los ataques se movían, principalmente, por la banda izquierda. Al filo del primer cuarto de hora, el Alavés lograba retener por un tiempo más el balón, pero no inquietaba a Misa, hasta que, al 17’, consiguieron su primer saque de esquina. La canaria controló el cobro sin mayores problemas.
Al 22’, uno de los pocos avances por la banda derecha, hasta el momento, presentó a Asllani sirviendo un balón entre líneas que Esther lograba rematar, aunque desviado. El Madrid seguía con el dominio, pero la guardameta contraria intervenía muy poco. Teresa lo intentaba, en el 27’, desde afuera del área, aunque el balón se iba por encima del larguero. Un minuto después, las merengues trataban de conseguir su premio por ambas bandas. Primero, Zornoza servía un balón en profundidad a Athenea, pero su pase al medio no pudo ser conectado. La siguiente jugada trajo el disparo, desde la izquierda, por parte de Carmona, que fue controlado por Jana. En el 33’, el remate, sin éxito, corría a cargo de Zornoza con un disparo desde la línea del área grande.
Lucía, al 34’, intentaba la individual forzando la intervención de Jana. Dos minutos después, la capitana del Alavés, Alba, veía la amarilla al sujetar a Asllani. El cobro lejano de Teresa, no pudo ser impactado por Rocío, en lo que fue una acción con mucho peligro. Al entrar en los últimos minutos, el Madrid atacó con ímpetu para tratar de desequilibrar el encuentro. Primero lo intentaba Esther y luego Asllani, sin conseguir facturar. Luego, la andaluza tuvo un mano a mano, en el 43’, pero Jana logró despejar la mejor opción del partido. Al finalizar la primera parte, la igualdad imperaba en el marcador, a pesar del amplio dominio merengue.
La árbitra Elena Casal Fernández dio comienzo a la segunda mitad que comenzó con el mismo guion de la primera. Miku veía la amarilla, en el 49’, tras sujetar a Asllani e impedir que condujera el contragolpe. La reanudación trajo el primer saque de esquina, sin consecuencias de inicio, pero que en segunda jugada mostró el derribo de Athenea. La falta cobrada por Zornoza encontró el remate de Esther, que se estrelló en el palo. Las merengues insistían y, al 54’, tuvieron un nuevo córner. Teresa lo cobró y el remate final de Lucía se fue alto.
Al 56’, Mikel Crespo sacó a Miku y Alba, para dar entrada a Gema y Nerea. Dos minutos después, un nuevo saque de esquina para el Real Madrid, pero el mismo resultado fallido con remate final de Lucía. En el 61’, Toril dio entrada a Nahikari en lugar de Oroz. En la reanudación, finalmente llegó el tan ansiado premio, cuando Esther logró escaparse y batir a Jana, tras la habilitación de la donostiarra recién ingresada.
El Alavés adelantó un poco sus líneas al verse abajo en el marcador, pero el Madrid iba por más. El partido estaba para cualquier cosa. Miren veía la tarjeta amarilla, en el 69’, al sujetar a Athenea. Al 72’, un intento de remate de Nahikari trajo un choque con Jana y Ohale que se llevaba la peor parte. Toril aprovechó para sacar a Asllani e ingresar a Kenti y las acciones se reanudaban mientras atendían a la nigeriana fuera del campo de juego. En el 77’, Crespo dio entrada a Carrillo en lugar de la defensora que no logró recuperarse. También sacó a Auñon y entró Vera.
El entrenador del Alavés se marchó expulsado, en el 79’, tras sus reiteradas protestas. Tres minutos después, las merengues reclamaban una mano en el área, que la principal no concedió. Jana le arrebataba el doblete a Esther, en el 84’, y al retomarse el partido salió Chamorro para que entrara Sanadri. Dos minutos después, la guardameta albiazul volvía a hacer de las suyas y evitaba la anotación de Olga Carmona.
En el 89’, Toril sacó a la sevillana y a Athenea, para ingresar a Caroline Møller y a la canterana Paula Partido. Por su parte, Elena Casal añadió cinco minutos al reloj y, en el 92’, se combinaron la danesa y Zornoza, pero el remate final de la madrileña, con su pierna ‘mala’, se fue desviado. No sucedió nada más y el Real Madrid consiguió un triunfo corto para lo mostrado en el terreno de juego. Sin embargo, le vale igual para acortar distancias y colocarse a tres puntos del tercer puesto que otorga plaza europea, con un partido menos. El sueño sigue vivo y las guerreras merengues continúan tras él.