Uno de los principales responsables, o tal vez el que más, del éxito que está viviendo el Real Madrid, es su técnico, Carlo Ancelotti. En eso no puede haber debate. Atrás ya debieron quedar, escondidos y apartados, todos aquellos que en los comienzos de la 2021/22 se despacharon a gusto, en contra de su gestión. Pero eso, ya lo hablamos por acá, en InformaFútbol, y no es la idea de este artículo.
En esta ocasión, el tema se trata de una entrevista concedida por el italiano, al periódico Il Messaggero. De ahí, vamos a rescatar algunos puntos que consideramos relevantes. No solo para conocer su pensamiento, sino también, su futuro, o al menos, el que tiene planeado.
De entrada, Ancelotti no se mostró especialmente preocupado por la gran cantidad de trofeos que integran su palmarés. Veinticuatro, para ser más exactos: “La verdad es que estas cuentas no me importan. Las haré al final, cuando un balance tenga más sentido. Ahora, estoy centrado en entrenar, me gusta el trabajo diario. Hasta hace algunos años, mis prioridades eran tácticas. Ahora, me centro en las relaciones humanas, en conocer a las personas y a las nuevas generaciones”. Y no cabe duda de que es así, pues si hay un detalle que se ve a leguas en su Real Madrid, es precisamente el buen ambiente. Algo que está presente en los titulares y en los que no lo son tanto.
Pasando a su visión del club, Ancelotti señaló: “Si hablamos de trofeos, los blancos y el Milan son los equipos a los que me siento más vinculado. El Madrid actual está a un nivel muy alto y no solo técnico. Es un equipo serio, con jugadores humildes. También las estrellas tienen los pies en el suelo. Modrić, Casemiro y Benzema, son los más expertos y gestionan el grupo. La calidad es indiscutible, pero solo ella, no sería suficiente. Lo humano es fundamental y este Madrid es único”. Un comentario que deja muy bien parada a la plantilla, pues aparte de sus títulos, el italiano puede presumir de conocer vestuarios de equipos grandes.
No faltó su definición de lo que es, para él, el Real Madrid: “Es un club gestionado por los presidentes y sus hinchas. Lo que surge de eso, es un ambiente familiar. Según los estatutos, el presidente debe ser primero un hincha. El Madrid no es solo una industria”.
Asimismo, Ancelotti habló del significado de esta, su segunda etapa, en el club. Algo que ya había asomado y, ahora, se encargó de confirmar: “Esta etapa en el Madrid cerrará mi carrera. Después de los blancos, me retiraré. El Real Madrid es el top del fútbol. Tiene sentido poner la palabra fin, tras esta experiencia”.
Volviendo a su etapa actual y que desde acá deseamos sea larga y aún más exitosa, habló de objetivos: “LaLiga estará más peleada que el año pasado. El Barcelona se ha fortalecido. El Sevilla sigue siendo competitivo, incluso después de las salidas y el Atlético es sólido. En Bilbao hay un entrenador experimentado como Valverde y el Valencia de Gattuso trae consigo una ciudad y una historia importantes”. Pero, al hablar de la Champions, su tónica es otra: “La Champions, por su historia y su dificultad, es el más importante. La dimensión del Madrid es esta. Es un club especial por esta vocación europea. Sería la 15…”.
Cierto es que también habló del Mundial, donde no se decantó por alguna selección en particular y llegó a nombrar hasta seis equipos a seguir. Pero sí, para cerrar, es oportuno señalar cuál es la visión que tiene Ancelotti, acerca de la influencia que puede tener en las ligas domésticas. Al respecto, indicó: “La cuestión principal no será la preparación a rehacer, sino el aspecto mental. Normalmente, después de un torneo de este nivel los jugadores se van de vacaciones, pero esta vez tendrán que volver a la base y volver al trabajo. No desconectarán y ésta es la verdadera pregunta: ¿cuál será su salud física y mental cuando comiencen los campeonatos nuevamente?”.
A pesar de su preocupación, creo que, en este sentido, el Real Madrid parte con ventaja. Contar con un entrenador de la calidad técnica y humana de Ancelotti es un plus importante. Conoce perfectamente a los suyos y, de seguro, sabrá sacar lo mejor de cada quien. Además, para su idea de juego, tiene dobladas todas las posiciones. Alguien podrá pensar que la delantera no contaría como una demarcación con esa característica, pero para él, que es el técnico, sí lo está. Ya luego podremos hacer otros análisis, pero a la luz de lo visto, la plantilla es mucho más profunda.
Aunque solo llegaron dos fichajes, hay que recordar que se fueron tres jugadores con los que que prácticamente no se contaba. De aquellos tres, ninguno de nosotros duda de la calidad humana de Marcelo, pero el aporte del excapitán al juego, además del de Isco y Bale tendía a cero. Ahora, contar con Rüdiger y Tchouaméni como recambios, le da otro matiz a la plantilla. Así que Ancelotti tiene otros recursos y variantes tácticas que, como gran técnico que es, sabrá explotar. Y mejor dejemos el análisis aquí, para no caer en el tema de su retiro. Un tema que, como el de otros integrantes de la plantilla, es preferible no ahondar y, como decía el profesor aquel, “carpe diem”.