Martin Odegaard se ha convertido en una de las grandes revelaciones de la temporada, siendo uno de los pilares de esta Real Sociedad que lucha por Europa.
Quien le diría a este joven de 21 años, que pasaría de pasar casi desapercibido en el Vitesse holandés, a ser una de las mayores sorpresas de LaLiga y tener la opción de volver al Real Madrid, equipo que le espera con los brazos abiertos.
En 2015, Florentino pagó casi tres millones al Stromsgodset para contar con los servicios del joven noruego, que en ese año tenía la friolera edad de 16 años. Odegaard empezó su andadura en el club blanco en el filial. Una de las fechas más importantes para el jugador fue el 15 de abril de 2015, día en el que debutó con el primer equipo. Al año siguiente, solo fue convocado una vez con Zidane, pero no llegó a saltar al campo. En la temporada siguiente, llegó su primera titularidad con el primer equipo, en el encuentro contra la Cultural Leonesa en Copa del Rey, jugando los 90 minutos. Fue convocado también en Copa contra el Sevilla, pero no disputó ni un minuto. En el mercado de invierno, se marchó cedido al Heerenveen, y empezó su andadura en Holanda.
En esa temporada con el Heerenveen disputó 17 partidos, anotando un gol y repartiendo tres asistencias. Cabe destacar su debut europeo en los play-offs de Europa League, marcando el único gol que consiguió en esta etapa con el Heerenveen. En la siguiente temporada siguió en este mismo equipo, jugando 26 partidos y marcando dos goles y dando dos asistencias. Hasta aquí, Odegaard no fue capaz de rendir a su mayor nivel.
Pero llegó la cesión al Vitesse, y se notó un gran cambio en el centrocampista noruego. En los 39 partidos que disputó, consiguió 11 goles y 12 asistencias, realizando una gran temporada, llamando así la atención de otros clubes de mayor prestigio.
Así llegó la Real Sociedad, y firmó una cesión que duraría dos años. El noruego tenía que demostrar lo que hizo la temporada anterior en Holanda, pero en esta ocasión en un equipo español, y de un mayor prestigio, y vaya si lo ha conseguido. Nadie esperaba que Martin Odegaard irrumpiera de tal manera en el equipo txuri urdin. En lo que llevamos de temporada, el noruego ha disputado 28 encuentros, marcando siete goles y repartiendo ocho asistencias. Cuando este ha ido convocado, solo fue sustituido en el partido contra el Leganés, además siendo cambiado por obligación tras unos problemas físicos. Siempre que ha estado disponible, ha sido fijo para Imanol. Es uno de los jugadores clave de la gran temporada que está realizando la Real Sociedad.
Martin Odegaard siempre se ha caracterizado por su trato con el balón, por tener una calidad exquisita. Esto es, acompañado de su gran visión de juego y de tener una gran capacidad de pase son capaces de romper líneas, sus grandes virtudes. También puede romper líneas esquivando rivales con su gran regate, dejando en ocasiones lujos de primera clase, propios de un jugador con una calidad y un control de balón excelsos. Tiene un gran disparo desde lejos, demostrándolo esta temporada con goles de media y larga distancia. Especialista en el lanzamiento de tiros libres, tanto para centrarlos como para dispararlos a puerta. Suele jugar en la posición de mediapunta, para realizar esos pases claves a los delanteros, y llegar al borde del área para probar disparo a portería. Este año ha retrasado algunos partidos su posición a la de interior, demostrando que cuando hay que defender, es de los más involucrados. Esto último lo ha hecho un jugador más completo, pudiendo jugar de interior y de centrocampista ofensivo, incluso arrancando desde el sector derecho del campo, para buscar alguna diagonal o probar disparos escorados.
En las oficinas del Bernabéu, se empieza a pensar la vuelta de la joven promesa noruega para la próxima temporada, ante la falta de jugadores de sus características en el conjunto blanco. La afición ya dio el visto bueno, cuando Odegaard salió ovacionado del campo en Copa del Rey. La cuestión es, si Zidane contaría lo suficiente con él, como para que el centrocampista de 21 años se pensara marchar del paraíso en el que se encuentra ahora, también llamado Anoeta…