|HISTORIA| El Wanda Metropolitano: Una nueva etapa para el Atlético

La ambientación, la estética y la iluminación son algunas de las cualidades de uno de los estadios más característicos de España, el Wanda Metropolitano (estadio oficial del Atlético de Madrid). Situado en el barrio de Rosas (Madrid), el recinto recibe a los aficionados colchoneros desde su inauguración en 2017, procedente de una inversión de unos 310 millones de euros aproximadamente. El campo, que ya ha vivido partidos tanto nacionales como internacionales, se encuentra en el comienzo de su etapa como ‘templo’ del club, a pesar de cargar con el pesado recuerdo de su predecesor, el Vicente Calderón.

El origen del recinto se remonta a 1994, donde se construyó como estadio de atletismo, impulsado por la Comunidad de Madrid. Tras más de una década de usos destinados a las fallidas candidaturas olímpicas realizadas en la misma ciudad, el Ayuntamiento de Madrid firmó un convenio con el Atlético en 2008, por el cual se traspasaba la propiedad del espacio al club colchonero (la marca Mahou también es partícipe del acuerdo). Con un proyecto de reformas planificado para el uso del club con vistas al año 2016, comenzaron a realizarse derribos de estructuras internas y progresivos aumentos de aforo en las gradas, desde la firma del contrato. Con ello, se pasa de 20.000 asientos, a los 68.450 que posee en la actualidad, acompañado de la creación de un graderío dividido en tres niveles, y del propio terreno de juego.

Finalmente, el plazo de inauguración como terreno del Atlético no se cumplió hasta un año después de lo establecido. El club acabaría jugando la temporada 2016-2017 en el Vicente Calderón, siendo la última en la que el clásico estadio vería jugar a los suyos. Con su despedida, este recopilaría un amplio legado de triunfos históricos, entre los que se encuentran seis ligas, siete Copas del Rey, dos Europa League o la elección como sede del mundial de 1982, entre otros.

Tras oficializarse la propiedad del Atlético de Madrid sobre el estadio el 16 de septiembre de 2017, el debut del club en el nuevo terreno no tardaría en llegar. Sería en la jornada cuatro de la temporada 2017-2018 de LaLiga cuando se disputaría el primer encuentro oficial en el estadio, correspondiente al Atlético – Málaga (1-0). A partir de entonces, el estadio ha presenciado todos los partidos locales del equipo rojiblanco, hasta el parón general de las competiciones producido en la actual temporada 2019-2020.

A pesar de ser muy reciente su posición como campo oficial del club, el Estadio Metropolitano ya puede atribuirse dos acontecimientos relativos a la entidad y al propio terreno físico. En primer lugar, el levantamiento de la copa de la Uefa Europa League de la temporada anterior por parte del Atlético, y, por otro lado, el título de sede de la final de la Champions de la misma temporada.

Un espacio adecuado para el fútbol moderno, con elementos básicos renovados (asientos, columnas, soportes…), con una mayor capacidad para acoger a la afición de su equipo, y con grandes inversiones en su mantenimiento, solo puede augurar buenos presagios para el club colchonero. Entre estadio y club abre ahora un nuevo camino, en el que la motivación y las ganas de lograr triunfos serán determinantes para que la entidad dé un paso adelante en el fútbol español.

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