El estadio de Mestalla se emplaza en la avenida de Suecia, concretamente en Valencia. Inaugurado el 20 de mayo de 1923, debe su nombre a una histórica acequia que discurría cerca de la grada sur. Actualmente se ha convertido en el más antiguo de 1ª División tras la desaparición del viejo “San Mamés”.
Originariamente, la travesía del Valencia CF tiene sus inicios en el Campo de Algirós en 1919. La expansión de seguidores valencianistas, unida a la necesidad que les planteaba la categoría de un terreno de juego más amplio, dan pie a pensar en un cambio de aires. Así tiene lugar la adquisición de los terrenos del actual Mestalla, los cuales tuvieron un coste de 316.439,20 pesetas.
En 1923, en un amistoso inaugural frente al FC Levante es donde tiene lugar el estreno del estadio. Aquel 20 de mayo, con una victoria por la mínima, (1-0), nace el hogar che. Por aquel entonces, la capacidad del estadio rondaba los 17.000 espectadores. Más tarde, en el año 1927 tienen lugar las primeras reformas del estadio con la ampliación a las 25.000 localidades. Además, aquella ‘ciénaga de barro’ era sembrada por primera vez de césped.
Bajo el reinado de Alfonso XIII, Mestalla acoge el 16 de mayo de 1926 la primera final de Copa del Rey. Hasta la fecha, el coliseo valencianista ha albergado un total de diez finales, señal de su majestuosidad. Sin embargo, durante la Guerra Civil Española (1936-1939), el campo cumplió las funciones de campo de concentración y depósito de chatarra, tras la cual únicamente se conservaría la estructura de la tribuna.
No sería hasta 1941 cuando el club lograría su primer título, la Copa del Generalísimo, la cual sirvió como soporte para la paulatina recuperación de Mestalla. Durante los años de la debacle habría sufrido muchos percances, pues Valencia fue uno de los emplazamientos de mayor actividad durante la refriega.
Con la llegada del decenio de los años 50, llegan momentos de gloria y jolgorio al club che. Bajo la presidencia de Luis Casanova Giner, considerado uno de los mejores presidentes de la historia del conjunto valenciano, llega la mayor remodelación del estadio. Nada más y nada menos que 47 millones de pesetas, cifra pareja la que abonó el club al fichaje del ‘matador’ Kempes en torno a 20 años más tarde. Las obras consistieron en la realización total del graderío sur, ampliación del graderío norte y de tribuna, junto con su respectiva unión. La cifra de localidades alcanzaría las 45.500 localidades. En esa misma década, en concreto en el año 1957, tiene lugar la famosa ‘Gran Riada’ del río Turia, que causaría enormes destrozos en Mestalla.
Desde el 23 de agosto de 1969, el mismo Mestalla pasó a ser renombrado como el estadio Luis Casanova en honor a los 20 años de presidencia que ejerció, siendo en noviembre de 1994, tras una petición del expresidente, cuando Mestalla recuperaba su nombre.
A finales de los años 70 e inicios de los 80, Mestalla se adecuó para acoger los encuentros de la fase final de la Copa Mundial de 1982, donde actuó como sede de la Selección Española en la fase de grupos. Así pues, diez años más tarde, Barcelona acoge los JJOO. Igualmente el combinado nacional, que se acabó convirtiendo en medalla de oro por primera vez en la historia, disputó algunos encuentros en el estadio valencianista.
La última ampliación data entre los años 1998 y 2001, aumentando en principio las localidades a 75564, pero viéndose posteriormente reducidas a 55.000. Dicha aminoración tuvo lugar diez años más tarde cuando el Tribunal Supremo las declaraba ilegales, teniendo así lugar su correspondiente derribo.
En el año 2013, Mestalla se modernizó con una nueva imagen. Este nuevo aspecto incluyó la pintura de los asientos con una combinación de colores naranja y blanco, mostrando la silueta de un gran murciélago negro en una de las gradas magnas del estadio. A su vez en 2014, se lleva a cabo una decoración en la parte externa del estadio. Dicha decoración contó con la instalación de paneles con los éxitos del club y de leyendas históricas valencianistas.
Actualmente el club se encuentra inmerso en el proceso de construcción de un nuevo estadio. Carece de denominación oficial, pero popularmente se le ha sido asignado el nombre de ‘Nou Mestalla’. El levantamiento comenzó el 1 de agosto de 2007, pero debido a la crisis inmobiliaria que golpeó al país, no se pudieron vender las parcelas del estadio actual, lo que bloqueó la situación a comienzos del 2009.
Mestalla, que seguirá siendo el corazón del valencianismo hasta que se coloque la última piedra en la avenida de ‘Las Cortes Valencianas’, ha sido también el refugio de otros clubes. La UD Levante por la construcción del actual Ciutat de Valencia, el CD Castellón durante una fase de exilio y el Real Madrid en una edición de la Copa de Europa, también se vieron acogidos en un estadio con tanta historia.
Excepto contadas ocasiones, todas las generaciones que acudieron a Mestalla tuvieron un sentimiento en común, el amor por unos colores. Ahora, pese a que algunos pretendan evitarlo, Mestalla ha recobrado la ilusión de una afición, que actualmente vuelve a vivir noches europeas, tal y como en tantas ocasiones ha tenido lugar en su largo recorrido. Se vibra y se siente valencianismo en un Mestalla, que es imparable con los suyos.