Davor Suker, exfutbolista croata del Sevilla Fútbol Club, fue recibido el pasado martes ante los medios oficiales del equipo para referirse a temas como su pasado sevillista o la situación actual del mundo.
El que a día de hoy es el presidente de la federación de Croacia, y que también se encuentra confinado en su domicilio, ha declarado lo siguiente acerca de esta pandemia: «El único contra el que todavía no sabemos jugar es el Covid-19. Espero que todos estemos en casa, que escuchemos a los doctores. Yo tengo en casa a mis padres y hay que cuidar de ellos haciendo este sacrificio. Hay que escuchar, como cuando fuimos a la escuela. Hacía mucho tiempo que no estábamos juntos un mes y hay que ver lo que más falta hace ahora. El fútbol es importante, pero la salud lo es mucho más y hay mucha gente peleando por su vida».
Posteriormente, echó la vista atrás y rememoró grandes momentos durante su etapa como jugador hispalense, y es que, a día de hoy, son muchos los sevillistas que guardan una gran imagen sobre el exdelantero.
«En el fútbol croata siempre mirábamos a Alemania. Era nuestra primera salida porque hay muchos croatas trabajando allí. Yo cuando era niño veía a Rummenigge y era mi ídolo. Pero llegó una oferta para ir al Sevilla y claro que dije que sí. Cuando llegué a Sevilla nunca tuve problemas de adaptación, solo el calor porque aquí estamos acostumbrados como mucho a 32 grados», decía sobre su fichaje por el Sevilla.
Incluso se animó a contar alguna anécdota que recuerda con gran cariño: «Recuerdo cada minuto del primer día que llegué a Sevilla. Estuve con Petrovic en el palco viendo el partido contra el Albacete. Cuando llegué me asusté porque estaba acostumbrado a los estadios de mi país con las pistas de atletismo. Lo vi todo muy pequeñito con tanta gente, es algo que no había dicho nunca».
Además, también elogió a algunos de sus compañeros durante aquellos años como Simeone, Unzué o Monchi, declarando que se siente muy alegre por verles triunfar en España.
Para finalizar, declaró que pudo haber acabado su carrera en el propio Sevilla: «Yo podía haber ido al Sevilla y terminar allí mi carrera un año más, pero yo soy un ganador y ya no tenía capacidad para entrenar todos los días y ser competitivo. Por eso preferí dejarlo en ese momento», concluía.
Otro gran futbolista que recuerda con amor y pasión lo que fue para él su carrera el Sevilla, y que vive como un aficionado más cada partido del club, esperando con ansias el fin de esta situación para poder volver a disfrutar del fútbol.