Poco a poco los equipos van retomando la actividad, tras la realización de los test médicos, las diferentes plantillas empiezan los entrenamientos de manera individual.
Este domingo le ha tocado al Getafe, que se ejercitaba tras 58 días. El pasado jueves, los jugadores, cuerpo técnico y trabajadores del club se sometían a las pruebas médicas para poder iniciar con todas las garantías la vuelta a la actividad. Dichas pruebas indicaban que los azulones están ‘limpios’ de coronavirus, por lo que el vestuario al completo no sufre impedimentos para ejercitarse.
En la mañana de hoy, Bordalás dirigía su primera sesión tras la pandemia. Los jugadores llegaban a las instalaciones de la Ciudad Deportiva vestidos de corto, cumpliendo todas las medidas establecidas, realizando trabajo físico sobre el césped, siempre sin contacto físico, y al terminar, abandonaron sin pisar los aseos, que de momento permanecerán cerrados. Y es que durante esta primera fase, los futbolistas no podrán interactuar entre sí y los técnicos tendrán que respetar la distancia de seguridad. Además, tal y como marca el protocolo diseñado por LaLiga para el regreso, se desinfectarán las instalaciones antes y después de ser utilizadas.
El ‘EuroGeta’ es quinto en la tabla, clasificado para los octavos de final de la Europa League, en los que se medirá al Inter de Milán.
Así ha transcurrido la jornada en el Coliseum, en la que se iniciaba el proceso de reenganche al ritmo de competición, aunque con más dificultades de lo habitual.