Sergio Reguilón se encuentra de dulce. El jugador cedido por el Real Madrid en el Sevilla Fútbol Club está completando una temporada extraordinaria en la línea del club hispalense, en el cual se ha hecho dueño y señor de la banda izquierda sevillista y a un nivel sobresaliente.
Tras su debut la temporada pasada, esta campaña le ha servido para asentarse como uno de los mayores proyectos de laterales. Entre Europa League y LaLiga ha jugado treinta y cinco partidos en los que ha anotado tres goles y ha repartido cuatro asistencias. Además todavía le queda el partido más importante del año, la final del campeonato fetiche de los nervionenses, objetivo marcado a principio de temporada junto con alcanzar los puestos de Champions League, siendo un pilar clave para lograrlo.
Todo esto ha hecho que media Europa pretenda su fichaje y, a pesar de estar muy a gusto en Sevilla, declarando que “La experiencia ha sido maravillosa”, su futuro es incierto. Hasta él mismo cuando se le ha cuestionado sobre donde jugará ha respondido: “No sé ni yo dónde voy a jugar el año que viene”.
Sin hueco en el club de la capital, ya que el puesto está cubierto por Ferland Mendy y Marcelo, los clubes más interesados son el Chelsea, el Inter de Milán, el Nápoles y el propio Sevilla FC.
El jugador, con el futuro sin resolver, sigue centrado en el partido del viernes ante uno de sus pretendientes, en el que se juega la obtención de su primer título como profesional.
Pedazo de jugador. Esperemos que haga partidazo el viernes.
Sólo le pido concentración para el próximo partido. Nos jugamos mucho.
Hoy debe estar contento porque buscando minutos de juego se ha encontrado una Copa.