La desbandada que comenzó con Roberto Martínez y que continuó con Luis Enrique, Tite, Paulo Bento y otros tantos sigue su curso. Los resultados no conformes con las expectativas en el Mundial de Catar no cesan de cobrar cuentas pendientes. Ahora, llegó el turno del seleccionador de Portugal, Fernando Santos.
Si alguna duda quedaba con el desempeño del ingeniero electrónico, el partido contra Marruecos terminó de confirmarla. Portugal contaba con un equipo plagado de estrellas y la apuesta de Santos dejando a su capitán, Cristiano Ronaldo, en el banquillo no resultó. Tampoco mostraron un nivel de juego que hiciera albergar esperanzas. Al final, crónica de una muerte anunciada y los lusos quedaban apeados del Mundial de Catar.
Durante ocho años, Fernando Santos se mantuvo al frente del seleccionado portugués. Llegó en 2014 para sustituir a otra víctima de este Mundial, Paulo Bento. Su compatriota no continuará al frente de la selección de Corea del Sur, con quien compitió en Catar.
Desde su llegada, Santos dirigió 109 partidos, ganó 67, empató 23 y perdió 19. Si bien es cierto, conquistó la Eurocopa en 2016 y la Nations League, la Copa del Mundo fue su gran deuda. Ahora, la Federación portuguesa decidió prescindir de sus servicios y así se une a Luis Enrique, seleccionador de España, como efecto secundario del mal papel ante Marruecos. El conjunto africano derrotó a ambos conjuntos, en octavos y cuartos de final.
Las informaciones apuntan a que el sustituto sería el actual entrenador de la Roma, José Mourinho. Sin embargo, al menos por el momento, no deja de ser una especulación. Con el transcurrir de los días, veremos si se confirma.