Era un secreto a voces y acaba de ser confirmado por uno de los protagonistas. Neymar ha reconocido la discusión del vestuario con el director deportivo del PSG, Luis Campos. En particular, con él y Marquinhos como protagonistas.
La información ya se había filtrado en Francia. Ahora, en la previa del encuentro de Champions, contra el Bayern de Múnich, el propio Neymar habló de ello: “De hecho, la discusión pasó. No estamos de acuerdo con lo que decía Luis (Campos), pero pasa. No es una pelea que va a romper todo. Yo peleo con mis amigos y los quiero, peleo con mi novia y seguimos juntos. Sí, es parte de la discusión. El fútbol no es solo amor. Hay respeto, pero hay cosas con las que no estás de acuerdo en este momento”.
Asimismo, Neymar aclaró las razones del altercado: “Hay discusión para mejorar el ambiente, el juego. No venimos de buenos partidos, venimos de derrotas, el ambiente se está volviendo aburrido, no estamos acostumbrados a perder. Cuando llega la derrota, molesta y es válido para mejorar nuestro equipo. Creo que eso ayudó mucho, empezamos a despejarnos, empezamos a ver lo que piensa el otro”.
Neymar también aprovechó para quejarse de la filtración ocurrida: “La noticia tiene un poco de mezquindad, falsedades en la prensa. Hoy en día, a través de los medios, esto afecta a mucha gente y la noticia no es cierta. Es complicado. Estoy en la sexta temporada y así es desde la primera. Es importante, pero no sé qué hacer, aquí no mando nada. Esto molesta a todos, al entrenador, a mis compañeros […] No es posible que todo lo que pasa en el vestuario salga a la luz. Es triste. Tenemos que resolverlo en nuestra casa. Hay que resolverlo en el ambiente laboral. Nos molestamos, pero es difícil saberlo. Algunas noticias son ciertas, otras no. Es parte del chisme”.
Ahora solo falta conocer cómo afectarán al PSG, en su encuentro de Champions, las derrotas y las filtraciones. Por lo pronto, Mbappé participó del entrenamiento, aunque su participación sigue en veremos. No cabe duda de que la situación para los franceses no será nada fácil y, más aún, con un rival enfrente como el Bayern de Múnich.