La temporada pasada comenzó de la peor manera para Coutinho, ya que le comunicaron que no contaban con él para esta temporada y que se marcharía cedido al Bayern de Munich, donde ha firmado una cifra de nueve goles y siete asistencias en lo que llevabamos de temporada.
A pesar de esto, desde Barcelona no tienen claro si prefieren su continuidad o, por otro lado realizar de nuevo una operación de cesión a un equipo que puede pagar el alto salario del jugador brasileño.
Si nos basamos en lo ocurrido en esta temporada con la delantera ( lesión de Suárez, Dembélé y venta de Carles Pérez), Coutinho tendría un sitio en el ataque azulgrana, formando un tridente junto a Messi y a Griezzman. Pero la temporada que viene Coutinho tendrá que hacerse hueco entre Luis Suárez, Messi, Griezmann, Braithwaite y Dembélé. Aun así, la parte positiva que se le puede sacar a esto es que el jugador puede jugar también en otras posiciones, como mediapunta o interior, algo que le podría gustar a Setién, para dar descanso a Busquets y formar un mediocampo formado por De Jong, Arthur y el propio Coutinho.
También, otro de los acontecimientos que han podido devaluar al carioca es la cancelación de la Copa América, la cual podría haberse convertido en un escaparate tanto para salir como para quedarse en el club blaugrana.
Por su puesto, la última palabra la tendrá la directiva azulgrana, que deberá formar una mejor planificación de temporada para que no vuelva a ocurrir el desastre de esta.