El enfrentamiento entre Julen Lopetegui y Bordalás supuso la expulsión por roja directa a ambos, un suceso que no ocurría desde el año 2009 en un partido que tuvo como protagonistas a Valladolid y Xerez.
El partido entre sevillistas y madrileños en el día de ayer no dejó insatisfecho al espectador neutro. Los Sevillistas lograron sumar los tres puntos en un partido que empieza a ser vibrante temporada tras temporada el que tiene lugar entre ambos conjuntos. Tanto es así, que los espectadores del partido asistieron a una de las peores entradas de lo que llevamos de esta temporada 20/21.
La dichosa jugada tuvo como actores principales a el extremo argentino sevillista Lucas Ocampos y al central azulón Djene. El central realizó una entrada de las que te hacen mirar a otro lado, suponiéndole, tras la ayuda del VAR a Munuera Montero, la expulsión al central togolés. Pero la cosa no acabó ahí.
Lucas Ocampos no pudo salir por su propio pie, lo que supuso la entrada de las asistencias con una camilla. El jugador fue llevado a una zona intermedia de los banquillos, donde el jugador entonó un doloroso “me han partido la pierna”, que supuso el inicio del enfrentamiento entre Julen, que posteriormente se disculpó en rueda de prensa, y Bordalás. El resto de la historia es más que conocido, pero, un dato recogido por @2010MisterChip nos sorprendió a todos. La expulsión directa a dos entrenadores no ocurría desde hace casi 12 años. El partido en cuestión fue un Valladolid-Xerez disputado el 8 de noviembre de 2009, con dos entrenadores históricos en los banquillos como son Mendilibar y Ziganda que finalizó con un empate a cero en el marcador.
La acción les costará a ambos técnicos una dura sanción que los tendrá alejados de los banquillos durante un tiempo. Mientras, el Sevilla FC sigue a la espera de saber el tiempo de baja de Ocampos, mientras que el Getafe CF aguarda la suspensión de partidos que acarreará la entrada de Djene sobre el jugador argentino.