Sevilla FC y Borussia de Dortmund se verán las caras en el encuentro de vuelta de los octavos de final de la Champions League. Los sevillistas llegan con el objetivo de remontar un resultado adverso para seguir en la competición y con cuatro derrotas en los últimos cinco partidos. Por su parte, el conjunto alemán se encuentra en su mejor momento. Desde la victoria en el Pizjuán, ha levantado el vuelo en la Bundesliga con grandes actuaciones para sumar dos victorias y una derrota en los últimos tres partidos.
El esquema
Edin Terzic colocó en el partido de ida un 1-4-3-2-1 sobre el campo. Aunque el resultado obtenido en el primer encuentro hace pensar que repetirá el mismo planteamiento, no será así. El preparador alemán no ha vuelto a utilizar dicho esquema, alternando en la Bundesliga con un 1-3-4-2-1 o 1-4-2-3-1. Terzic también tendrá que lidiar con la baja confirmada de Jadon Sancho, por lo que el 1-4-2-3-1 ya utilizado en el último partido liguero ante el Bayern de Múnich, tiene grandes posibilidades de ser el sistema elegido para el partido de hoy.
El planteamiento ofensivo: hincapié en los centros laterales
La jugabilidad del conjunto alemán no ha variado en exceso tras la destitución de Favre. Terzic continúa con su filosofía de convertir a su equipo en dominadores del balón. Sus porcentajes así lo demuestran, superando en la mayoría de los encuentros el cincuenta por ciento de posesión. Sin embargo, la verdadera arma ofensiva de este equipo es de origen noruego y tiene una efectividad de cara a gol que ya demostró en el partido de ida. Haaland volverá a jugar como único punta, lo que le da una libertad de movimientos excelsa a la hora de buscar combinaciones con el resto de sus compañeros.
Además, el joven noruego cuenta con tres escuderos envidiables para cualquier equipo de talla mundial. Marco Reus, Thorgan Hazard y Brandt son los encargados de procurar que Haaland siga batiendo récords de goles por partido y hacer menos sensible la baja de Jadon Sancho para el partido de hoy. Y la cosa no queda ahí, en el banquillo se encuentran jugadores emergentes, o ya emergidos, como Reyna, Moukoko o Jude Bellingham.
El planteamiento defensivo: solidez defensiva en vez de ofensiva
El Borussia Dortmund se está topando una y otra vez con un gran problema, la facilidad de sus adversarios a la hora de encajarles un tanto. La retaguardia alemana la conforman Hummels y Akanji, ambos con un gran poderío físico pero que dejan grandes dudas en cuanto a la velocidad. La mentalidad, a veces demasiado ofensiva, de las líneas de mediocampo hacia adelante conlleva dejar en inferioridad numérica a sus dos centrales y a la posición de pivote formada por Deleaney.
Un problema que se agrava si alguno de los dos laterales decide lanzarse al ataque y la jugada no se finaliza. Fruto de ello, el Borussia Dortmund cuenta con 35 goles en contra en 24 partidos, lo que supone 1.32 goles recibidos por partido. La eliminatoria es una prueba de ello, pues tras cuajar el equipo alemán una gran primera mitad, se fue con dos goles encajados en los segundos cuarenta y cinco minutos que metieron al equipo sevillista de nuevo en la eliminatoria.
El nombre bajo la lupa sevillista
Haaland: el joven delantero noruego se está afianzando en la élite a base de goles y grandes actuaciones. A sus 20 años cuenta esta temporada con 29 goles en sus 28 partidos disputados en las diferentes competiciones. Haaland le ganó el duelo de ida a la parcela ofensiva sevillista, anotando dos de los tres goles alemanes. Veremos cómo se las ingenian Diego Carlos, Koundé y Fernando para desdibujar al phanter noruego.
A diferencia del partido de ida, Julen podrá contar de cara al partido con Lucas Ocampos y Marcos Acuña para intentar remontar la eliminatoria en el Signal Iduna Park. Terzic, por su parte, dispondrá de todo el plantel a excepción de Jadon Sancho. Un partido apasionante el que nos espera en el día de hoy. Dos equipos con dinámicas totalmente opuestas, de nuevo, desde la última vez que se enfrentaron y una eliminatoria que favorece a los alemanes por el resultado cosechado en la ida.