Las Lionesses buscarán su primera copa del mundo este domingo frente a España después de haber ganado dos títulos en algo más de un año, la artífice de este gran éxito es su seleccionadora: Sarina Wiegman.
Wiegman antes de ser entrenadora fue futbolista profesional siendo la primera en alcanzar los 100 partidos con su selección, Países Bajos. En 2006 comenzó su andadura como entrenadora en el club que le vio nacer como futbolista, Ter Leede.
En 2014 iniciaría el camino que puso su nombre en la boca de todos los aficionados del futbol femenino. Se unió al equipo técnico de la selección femenina de Países Bajos. Se formó como entrenadora y fue ganando experiencia, tanto como asistente como de primera entrenadora. Fue en el 2017 que la federación neerlandesa le nombro entrenadora de la selección. Con la Eurocopa a la vuelta de la esquina, Sarina se hizo cargo de un equipo al que no le faltaba talento pero que nunca había conseguido un título.
La Euro de ese año fue el punto de inflexión. Con la competición celebrándose en los Países Bajos la entrenadora tenía una presión añadida por llevar a la selección a lo más alto. Vivianne Miedema, Danielle Van de Donk, Lieke Martens, Stefanie van der Gragt… eran algunas de las jugadoras a las ordenes de Wiegman. Ese verano Países Bajos deslumbró a Europa y escaló hasta convertirse en la campeona continental.
El idilio entre Sarina Wiegman y la selección holandesa continuó hasta el mundial 2019 en Francia. Con una plantilla muy similar a la de la Euro, había muchos ojos puestos en esta selección y en si sería capaz de arrebatar la corona a Estados Unidos. La selección acabó cayendo 2-0 contra las estadounidenses. Pese a no conseguir el titulo su rendimiento fue suficiente para clasificarse para los juegos de Tokio, donde Estados Unidos volvió a batirlas, esta vez en cuartos de final. Tras esto Wiegman dejó la selección de Países Bajos y, con ella, la mejor etapa en su historia.
Su nuevo reto fue la selección inglesa. Tomó el relevo de lo que era un gran equipo, pero como pocas ideas y aún menos resultados. Y lo volvió a hacer. Con una Eurocopa que se celebraría en Inglaterra y un equipo al que su afición no le tenía mucha fe, Wiegman llevó a la selección inglesa a levantar el título. La selección también levantó el título de la Finalissima contra Brasil, el campeón de la Copa América. Para más asombro, Inglaterra solo ha perdido un partido desde que la seleccionadora holandesa está al mando.
Su buen hacer la han llevado a convertirse en leyenda en su país también como entrenadora y a conseguir el premio de mejor entrenadora femenina de la FIFA en tres ocasiones. Ahora, con grandes bajas en la selección, ha conseguido volver a guiarlas hasta una final del mundo, como ya hizo con Países Bajos. Queda por ver si el domingo levantará la copa o sufrirá la misma suerte que con la selección neerlandesa.
Foto vía: Twitter @Lionesses