El seleccionador de Alemania llegó al cargo el 1 de agosto de 2021 y hoy, poco más de tres años después, sale de él.
«La junta general de accionistas y el consejo de supervisión de la DFB GmbH und Co. KG decidieron hoy, a propuesta del presidente de la DFB, Bernd Neuendorf, despedir de sus funciones al seleccionador nacional Hansi Flick y a los dos entrenadores asistentes Marcus Sorg y Danny Röhl con carácter inmediato», reza el comunicado de la federación alemana de fútbol.
Durante su tiempo al frente de la selección alemana, el seleccionador ha tenido una experiencia que ha dejado huella. Dirigiendo un total de 25 partidos, la selección alemana ha mostrado su capacidad ofensiva, anotando un impresionante total de 60 goles a favor. No obstante, también ha tenido que enfrentar la férrea resistencia de sus adversarios, con 30 goles en contra en esos mismos encuentros.
Si observamos en detalle su historial de partidos, se revela una mezcla intrigante de resultados. Con 12 victorias en su haber, el seleccionador ha demostrado la capacidad de liderar a su equipo hacia el éxito en múltiples ocasiones. Estas victorias han sido celebradas con entusiasmo por los aficionados, ya que enfrentar a selecciones de alto nivel no es tarea fácil.
Sin embargo, también se han presentado desafíos en el camino. Los siete empates registrados en estos encuentros son un reflejo de la competitividad y equidad que caracterizan a las selecciones de élite. Cada uno de estos empates ha sido una batalla táctica en la que la selección alemana ha luchado valientemente para asegurarse al menos un punto en el marcador.
Por otro lado, las ocho derrotas experimentadas durante este período han servido como lecciones valiosas. Estas derrotas, aunque pueden haber sido decepcionantes en el momento, han brindado oportunidades para el aprendizaje y el crecimiento. Son un recordatorio de que incluso las selecciones más fuertes deben mantenerse alerta y preparadas para afrontar desafíos imprevistos.
En resumen, la estadística del seleccionador en sus 25 partidos al frente de la selección alemana es un reflejo de la complejidad y la imprevisibilidad del fútbol de élite. Con una mezcla de victorias, empates y derrotas demuestra que, que en el deporte, el camino hacia el éxito está lleno de altibajos.