El Nuevo Los Cármenes ha acogido uno de los partidos más emocionantes de la vigente edición de la Copa del Rey en el que se han enfrentado el Granada con el FC Barcelona.
El Granada ha salido con un 4-2-3-1 con Aarón Escandell en portería; Con Víctor Díaz, Germán, Domingos Duarte y Carlos Neva en defensa; con Eteki, Montoro, Antonio Puertas, Soro y Kenedy en el centro del campo y con Soldado de referencia en ataque.
Diego Martínez ha hecho varios cambios respecto al anterior partido de Copa del Rey: en ese partido contra el Navalcarnero jugó con Neuhén Pérrez, Quini, Fede Vico y Jorge Molina, en este ha apostado por Duarte, Carlos Neva, Montoro y Kenedy.
El Barça ha salido con un 4-3-3 con Ter Stegen en portería; con Sergi Roberto, Araújo, Umtiti y Jordi Alba en defensa; con Busquets, Pedri y De Jong en el centro del campo y con Griezmann, Trincao y Messi en ataque.
Koeman también ha hecho varios cambios respecto al partido anterior de la Copa del Rey: en ese partido frente al Rayo Vallecano jugó con Neto, Lenglet, Junior, Mingueza, y Riqui Puig, en cambio, para este enfrentamiento apostó por Ter Stegen, Umtiti, Jordi Alba, Sergi Roberto y Pedri.
El Barça empezó el choque dominante y apabullante. Parecía que estaban muy concentrados y decididos a meter al Granada en su área desde el minuto 1 y así fue toda la primera mitad.
El conjunto de Ronald Koeman recuperaba muy rápido el balón y eso le permitía seguir atacando con asiduidad, el partido se le iba a hacer eterno a los locales. Pero en el primer error que tuvo el Barça, el Granada marcó. Umtiti falló un pase en salida de balón y Soro metió un centro raso para que Kenedy solo tuviera que empujarla. Había pasado media hora de partido y el Granada ya iba ganando. Nadie en el equipo azulgrana se lo podía creer.
El gol desconcertó bastante a los visitantes y el choque terminó al descanso con ese marcador. Pero nada más empezar la segunda mitad, el Granada consiguió aprovechar otro error de colocación de Umtiti para lanzar un balón largo que Soldado se encargaría de aprovechar para batir a Ter Stegen y poner el 2-0 en el electrónico. La eliminatoria se le ponía cuesta arriba a los culés.
Desde ese entonces a los azulgranas les entraron las prisas y no sabían por dónde derribar a la defensa local. Y a partir del minuto 70, el partido se convirtió en un monólogo del Barça que no dejaba al conjunto de Diego Martínez salir de su propio campo.
El FC Barcelona rondaba el área de Aarón sin parar, intentando encontrar el hueco necesario para generar peligro. Lo intentaba constantemente por el carril central y por la banda derecha de Dembélé y Dest que entraron en el segundo tiempo. Parecía que el tiempo se agotaba, pero un pase extraordinario de Messi permitió a Griezmann rematar de cabeza para provocar el gol en propia meta de Aarón en el minuto 88. Al Barça le quedaba un gol y tenía el tiempo en contra. Los nervios volvían a estar a flor de piel.
En ese momento el conjunto comandado por Leo Messi se lo empezó a creer y al Granada cada vez le costaba más llegar a las coberturas y tapar todos los espacios. Tanto fue así que, en el tiempo de descuento, de nuevo, Messi lanzó un excelso pase a Griezmann que asistió de cabeza a Jordi Alba para poner el 2-2 en el marcador y enviar el partido a la prórroga. Hasta hacía 5 minutos el Granada ganaba por 2 goles, así es el fútbol.
Aunque antes de eso, Luis Suárez consiguió plantarse en el área del Barça prácticamente mano a mano con Ter Stegen pero mandó el balón fuera, dejando a los aficionados granadinos y culés sin aliento.
Ya en la prórroga, el Barça estaba con un equipo muy ofensivo, pero con la calma necesaria para afrontar lo que restaba de encuentro. Manejaba el balón y parecía tener más energía que los granadinos. Y así fue cuando Jordi Alba asistió a Griezmann con un gran centro para adelantar a los visitantes por 2-3.
Parecía casi definitivo por las sesaciones ofrecidas en el campo, pero Fede Vico aprovechó un penalti de Dest que señalo Sánchez Martínez para volver a poner las tablas en el marcador. El Granada aun tenía algo que decir.
Finalmente, Frenkie de Jong fusiló después de un rechaze de Aarón para volver a poner al Barça por delante y la guinda la pondría de nuevo Jordi Alba con una volea para sentenciar el encuentro.
El conjunto de Koeman y Messi se ha clasificado para las semifinales de una Copa del Rey que con este formato está emocionante de verdad, con partidos como estos donde se lo juegan todo y se están dando muchas sorpresas. Ahora el Barça a esperar a su rival en el sorteo del viernes.