El actual líder de La Liga, el Atlético de Madrid, tiene diez partidos por delante donde debe quedar invicto para hacerse con la competición. Sus rivales directos se encuentran pisándoles los talones a los del Cholo. El FC Barcelona únicamente se encuentra con cuatro puntos menos y el Real Madrid con seis, por lo que cada encuentro es decisivo para la clasificación final.
Además, en estas diez últimas jornadas se encuentran varios puntos de inflexión donde La Liga se podría decantar entre uno de estos tres equipos. El encuentro entre el Real Madrid y Barcelona en la casa de los blancos el 10 de abril. Y el Atlético de Madrid y los blaugranas se verán las caras en el Camp Nou el 9 de mayo.
El Atlético de Madrid
El conjunto rojiblanco es el único de los tres equipos que depende de sí mismo. Aunque en Navidad los colchoneros se encontraban a gran distancia de sus rivales en la clasificación, el equipo se ha ido fatigando hasta no poder permitirse ni un fallo más.
Tras caer en octavos de final de la Champions League ante el Chelsea de Tuchel, y en la segunda ronda de la Copa del Rey ante el Cornellà, La Liga es la única competición donde el Atlético de Madrid está vivo, siendo el primer candidato a ella.
Su próximo partido es el próximo domingo 4 de abril, donde los colchoneros se enfrentarán al Sevilla, y una semana después al Betis. Ambos encuentros fuera de casa. El único partido fuera de su alcance es el clásico en Valdebebas del 10 de abril. Aunque para los del Cholo, cada jornada restante es una final.
El Barcelona
El conjunto blaugrana está en un sólido momento tras 18 jornadas seguidas sin perder. Aunque los de Koeman también tienen la cabeza en la final de la Copa del Rey que disputarán ante el Atlethic el 17 de abril, justo una semana después del clásico. A pesar de que contará con la semana anterior sin partidos, estos se le acumularán al club después de la fecha.
Cinco de sus diez encuentros son fuera de casa. Y quizás su partido más decisivo para pasar al Atlético de Madrid en la competición es enfrentarse directamente a él, esta vez en su propio campo. El Barcelona no se puede permitir pinchar en esta recta final, y solo le queda limitarse a que sea el líder el que lo haga.
El Real Madrid
Los blancos se juegan la temporada en la segunda semana de abril. El clásico se encuentra entre su doble enfrentamiento con el Liverpool por los cuartos de final de la Champions, lo que le lleva a Zidane a no poder reservar a ninguno de sus jugadores.
Con el partido entre el Barcelona y el Atlético de Madrid, los de Zidane podrían recortar puntos a cualquiera de sus rivales en el caso de que no fuese derrotado en ninguna de los partidos anteriores. Otro partido clave es contra el Sevilla en casa el 9 de mayo. Al Real Madrid solo le queda hacer sus deberes de salir invicto, y limitarse a esperar la caída del Barcelona y Atlético de Madrid.