El FC Barcelona tiene un largo verano por delante para remodelar la plantilla y conseguir esa revolución que se lleva buscando desde el año pasado.
Uno de los principales problemas de este Barcelona son los elevados sueldos de jugadores que, desde hace ya bastante tiempo, no son claves ni esenciales en la plantilla. Los casos como Umtiti, Pjanic, Junior, Neto, etc… son un claro ejemplo de una mala gestión de la masa salarial.
Es por eso que el Barça se plantea tener más bajas que altas durante el próximo mercado de fichajes. Además, también negociarán una rebaja de la masa salarial con los jugadores que se queden.
Por lo que respecta a las bajas del club, los casi seguro que saldrían serían Umtiti, Pjanic, Neto y Coutinho. El francés ya ha recibido ofertas del Zenit y debido a su rol, prácticamente inexistente en el equipo, preferiría marchar. Por lo que respecta a Pjanic, el jugador no ha tenido los minutos que esperaba, de hecho, no ha jugado prácticamente nada. En este caso habría dos opciones, si siguiera Koeman se le buscaría salida (el Inter de Milán se ha interesado por él) y si se marchara el holandés, dependería del rol que le quisiera dar el nuevo entrenador, pero siempre con una rebaja salarial como condición.
Neto es uno de los casos más claros, y no por el nivel que ha dado, porque lo ha hecho bien y ha cumplido, sino porque en la situación económica actual del Barcelona, se tiene claro que como portero suplente podría estar Iñaki Peña, jugador de la casa, con una ficha mucho más baja y con menos mercado que Neto. Y por último, Coutinho. El brasileño, que ha sido el fichaje más caro de la historia del club, ha sido un fracaso absoluto. Cuando parecía que comenzaba a tener importancia en el equipo se lesionó y no lo hemos vuelto a ver en toda la temporada. El Everton lo quiere y estaría dispuesto a ofrecer 40 millones de euros.
Además de estos jugadores, también es muy probable que salgan otros como Junior, que ha jugado muy poco y el Barcelona no lo ve como el sustituto de Alba, y menos con Alejandro Baldé llamando a la puerta del primer equipo. Braithwaite, ha cumplido a la perfección con lo que se le pedía. Su rol secundario y para revolucionar los partidos ha servido en partidos importantes, como la vuelta de la semifinales de Copa, el partido contra el Granada en Copa, etc. Pero teniendo en cuenta las posibles llegadas, no tendría hueco. Lenglet, con sus dos últimas temporadas a un bajo nivel y teniendo en cuenta que es un jugador con mercado por su edad y su experiencia, si llegara una buena oferta el Barcelona se lo plantearía.
Griezmann, no es una de las opciones principales, pero si llegara una buena oferta también se lo plantearían. La temporada del francés no ha sido mala, de hecho, tiene buenos números en lo que a goles y asistencias se refiere, pero podría ser una buena opción para hacer caja y rebajar la masa salarial. Trincão, que no ha acabado de demostrar lo que prometía, pero tampoco ha tenido muchos minutos para hacerlo. El Barcelona se planteará si venderlo o cederlo dependiendo de las ofertas que lleguen.
Por lo que respecta a las posibles altas, el Barça tiene poco margen de maniobra. Eric García, lleva sonando desde el año pasado, el excanterano azulgrana quiere volver a casa y está realmente cerca, es muy probable que, una vez terminada la Champions, firme con el equipo culé. Además, al terminar contrato con el equipo “citizen”, el Barcelona no pagaría traspaso.
Sergio Agüero, también termina contrato y llegaría para suplir el puesto de ‘9’ que necesita el Barcelona. Memphis Depay, otro que termina contrato, es una petición de Koeman pero seguramente llegaría aunque no siguiera el entrenador. Uno de los mejores de la Ligue 1, con mucho gol y técnica. Por el momento estas serían las altas más seguras para el equipo, añadiendo también las subidas al primer equipo de jugadores como Álex Collado, Óscar Mingueza o Ilaix Moriba.
El FC Barcelona tiene un largo recorrido para conseguir la famosa revolución que tanto tiempo lleva buscando. Algo que no es fácil de hacer debido a los altos salarios de los jugadores, pero que es esencial para la economía del club y para la competitividad del equipo en un futuro.