Club Atlético Osasuna es uno de los equipos que más cargada tiene a día de hoy la enfermería, viéndose ocupada por hasta nueve jugadores, los cuales no podrán participar en el próximo encuentro liguero contra el Real Betis, que tendrá lugar el lunes a las 21:00 en el Villamarín. De todas las bajas citadas previamente, ninguna es por causa del Covid-19, siendo el club rojillo el equipo de LaLiga al que menos le está afectando el virus, solo registrando un positivo en toda la temporada, el del delantero Budimir.
Así pues, junto a las lesiones que se encuentran en proceso de recuperación de Darko Brasanac, Chimy Ávila, Rubén Martínez, Aridane Hernández y de Adrián López, en los últimos dos encuentros oficiales del club se han producido cuatro lesiones más, dos por encuentro. La victoria del CA Osasuna frente al Granada en El Sadar se saldó con dos noticias negativas, las lesiones de Budimir y Jony Rodríguez, piezas claves del once de Arrasate.
Asimismo, el pasado miércoles en el encuentro copero ante el Almería se produjeron dos más, la de Facundo Roncaglia, que posiblemente tenga que pasar por quirófano tras sufrir una rotura del recto anterior de su pierna derecha, lo que daría prácticamente por finalizada su temporada, y la de Lucas Torró, que sufrió una rotura de ‘grado I B’ en el aductor menor del muslo izquierdo.
En definitiva, nueve bajas que lastrarán de forma muy notable el rendimiento del club en los próximos encuentros venideros ante la carga de minutos que recibirán los disponibles, existiendo únicamente 13 profesionales aptos para jugar, de los que solo Sergio Herrera, Nacho Vidal, Juan Cruz, Oier, Bajra, Rubén García, Íñigo Pérez y Moncayola no han sufrido ningún tipo de problema físico durante la temporada.
Por lo tanto, Jagoba Arrasate tendrá que hacer malabarismos para sacar un once que pueda competirle durante los 90 minutos al Real Betis Balompié, ya que Osasuna necesita los tres puntos como el comer, debido a que se encuentra a tan solo un punto del descenso, siendo el club que lo delimita.