19 de julio de 2020, el Real Betis disputaba su último partido de una liga nefasta, marcada por la destitución de su extécnico Rubi y por la irrupción de un clima insólito y temido como el COVID-19. Así pues, el Real Betis liderado por Alexis Trujillo, trasladado a la posición de entrenador hasta finalizar la temporada, se dirigía al José Zorrilla para disputar la última jornada liguera, con el fin de cerrar decentemente el curso liguero, pero, finalmente, el cuadro andaluz cayó derrotado por 2-0, cerrando una temporada gris en la 15° posición.
La afición, notablemente crispada, pedía soluciones y la primera de ellas sería un entrenador acorde con la grandeza de este club y de esta afición, un técnico de renombre que volviese a hacer soñar al beticismo con la consecución de éxitos, siendo escogido, tras barajar muchos nombres, Manuel Pellegrini.
El chileno, a pesar de su dilatada y admirable trayectoria, no desató una ilusión radiante en la ciudad de Sevilla, puesto que la afición, cansada de entradas y salidas de entrenadores, en teoría, ilusionantes, se acostumbraban a ver decrecer su ilusión a primeras de cambio, como consecuencia de los continuos bajones de la plantilla. Así pues, el beticismo lo que quería era resultados.
Llegaba el primer partido liguero ante el Alavés en un difícil estadio como el de Mendizorroza, pero en el que, a pesar de disputarse un partido trabado con ocasiones para ambos, finalmente, la victoria caía para el cuadro bético en los últimos instantes del partido. ¿Sería este el resurgir de un ‘nuevo’ Betis?
La respuesta a esta cuestión parecía clara en los primeros encuentros donde el Betis logró dos puertas a cero consecutivas, logrando sendas victorias. Sin embargo, tras la derrota ante el Real Madrid, marcada por las actuaciones arbitrales, venía lo peor, un Betis apagado, un Betis que tras recibir dos goles se rendía y volvía a recibir goleadas, como la del Getafe, Real Sociedad, Barcelona o Athletic o derrotas por la mínima ante rivales directos, es decir, el Betis de siempre.
Llegó el mes de enero, mes importante por los encuentros coperos, que podría inducir a una rápida vía para Europa, y ante rivales directos, y parece ser que el despertar se inició. Tras el empate en el derbi contra el Sevilla FC, el conjunto bético lleva ocho partidos seguidos sin perder, obteniendo Manuel Pellegrini, el mayor porcentaje de victorias en la historia del Real Betis, al menos, con 20 partidos disputados, 52%, según informa Fran Martínez de LaLiga en Directo.
Claro está que el mensaje de Manuel Pellegrini parece haberse instaurado en el Real Betis, unos jugadores que presionan, luchan, defienden y, sobre todo, no dan ningún partido por perdido. Asimismo, el técnico chileno ha llevado al Real Betis a la séptima posición y a los cuartos de final de La Copa, en la que lucharán contra el Athletic Club para lograr el billete a semifinales. El cambio parece llegar pero, ¿será Pellegrini capaz de mantener esta situación y fijar los cimientos para un Betis grande? En unos meses sabremos la respuesta.