El Real Madrid sigue siendo un equipo irregular. Prueba de ello son las victorias importantes ante Barcelona e Inter, frente a las duras y difíciles de explicar las sufridas derrotas en Mestalla y en Valdebebas ante el Shakhtar. En el día de ayer, el conjunto blanco perdió por 4-1 en Mestalla en un partido donde todos los defensas de los blancos fueron decisivos.
Un Real Madrid que la temporada pasada se caracterizó por ser un equipo que recibía pocos goles, y en los partidos de post confinamiento, la mayoría de sus encuentros acababan 1-0 para el conjunto madrileño. Sin embargo, esta temporada no es así. El conjunto de Zinedine Zidane ha encajado en LaLiga nueve goles en ocho partidos, y en la Champions League las estadísticas no van a mejor, en tres partidos jugados ha recibido siete goles. El Real Madrid lleva siete partidos seguidos encajando gol.
En el partido de ayer se reflejó la temporada de los defensas. Los cuatro defensas provocaron un gol para el conjunto valenciano. Lucas Vázquez, Marcelo y Sergio Ramos provocaron un penalti cada uno, mientras que Varane anotó en propia. Concretamente, el lateral izquierdo brasileño ha recibido duras críticas dado que el nivel defensivo ofrecido por el equipo cuando está en el verde desciende de forma sorprendente. Zidane en rueda de prensa admitió los problemas en defensa: «Es verdad que atrás no estamos como antes.»
Ahora hay tiempo para descansar y recuperar esa seguridad en defensa. Zidane tiene que buscar soluciones, y lo buscará en el parón, pero no podrá contar con Ramos y Varane, ambos convocados por su selecciones.
En nuestro canal de Youtube, hemos analizado los motivos por los que el Real Madrid puede volver a ganar LaLiga.