El Real Club Deportivo de La Coruña, más comúnmente conocido como el Deportivo o el Dépor, se encuentra actualmente en puestos de descenso a Segunda Federación, la cuarta categoría del fútbol nacional. El club gallego tocó el cielo en la temporada 99/00 cuando se proclamaron campeones de Primera División con el denominado «Súper Dépor», pero en la temporada 19/20 descendieron a la siempre complicada 2ºB (Actualmente 1º RFEF) de la todavía no han conseguido volver.
El Deportivo es considerado uno de los gigantes del fútbol español, colocándose en la decimosegunda posición de la clasificación histórica de La Liga situándose por delante de equipos como el Osasuna, Racing de Santander o Sporting de Gijón. El conjunto coruñés lleva atrapado en la tercera categoría del fútbol español por cuatro temporadas y no parece algo fácil de revertir a corto plazo.
Un equipo destruido
La situación del conjunto gallego es muy peligrosa, tanto en lo deportivo como en lo económico. El Dépor se sitúa en puestos de descenso a Segunda Federación tras empatar la última jornada a uno frente a la Ponferradina en El Toralín. No conocen la victoria desde el 2 de septiembre cuando vencieron por 0-3 al Lugo en el derbi gallego disputado en la segunda jornada de competición, un total de seis partidos sin sumar de tres.
El expresidente del club, Lendoiro, decía lo siguiente hace unas semanas: «Si sumamos entre ocho y doce puntos mantendremos nuestro máximo objetivo, pero si el número de puntos se reduce supondría casi renunciar al título y pasar a depender de entrar en la lotería del playoff».
Por otro lado, en el plano económico, la Primera Federación es una categoría muy difícil para gestionar a nivel financiero debido a que no se ha terminado de profesionalizar la categoría en todos los aspectos. Los ingresos de televisión son mucho menores que los de Segunda División, mientras que los sueldos de muchos jugadores son más altos que los de categorías superiores.
El Deportivo de la Coruña tiene una plantilla para luchar por un posible ascenso a Segunda División, pero los resultados no están siendo ni mucho menos los esperados. Jugadores como Ian Mackay, Ximo Navarro, Balenciaga, Salva Sevilla o Lucas Pérez llegaban a tierras gallegas con un objetivo claro, sin embargo, el desempeño no ha estado a la altura.
Un hilo de esperanza
El Real Club Deportivo de La Coruña sigue manteniendo esperanzas y buenas estadísticas en algunos aspectos pese al desastre del comienzo de temporada. El conjunto gallego es, actualmente, el que ostenta el estadio más difícil de los primeros 82 clubes españoles. Riazor se ha vuelto una de las mayores armas del Dépor gracias a su increíble afición que jornada a jornada llena un estadio acostumbrado a noches mágicas. El Dépor ostenta una asistencia media en su estadio superior a 22.000 personas lo que lo sitúa en la undécima posición a nivel nacional por delante de equipos como Osasuna, Villarreal, Granada o Barcelona.
El conjunto blanquiazul debe hacer un análisis profundo para poder encontrar las mejores soluciones a los problemas que actualmente golpean al conjunto coruñés. El Deportivo debe buscar ejemplos de éxito para intentar mantener el suyo a flote buscando soluciones para un bote que está muy cerca de hundirse. El Córdoba, el Mallorca, el Osasuna, etc, son equipos que no hace mucho se encontraban al filo del descenso, pero los cuales consiguieron evitarlo gracias a mantener un bloque unido y confiar de que era posible conseguir los objetivos.