Rubén Alcaraz ha sido el protagonista en la mañana del día de hoy. Una noticia muy positiva para los de Pucela que afirma que el futbolista ha superado su lesión muscular y ya ha podido completar el entrenamiento al mismo ritmo que sus compañeros.
El mediocentro del Real Valladolid se perdió el primer mes de la competición, debido a que sufrió un fuerte pinchazo en los isquiotibiales en una sesión de entrenamiento de hace algo poco menos de un mes. Los pronósticos se temieron lo peor y la baja del futbolista terminó siendo catalogada como una lesión miotendinosa de Grado II en el bíceps femoral derecho. Desde ese tiempo, tuvo que apartarse de sus compañeros y comenzar un trabajo de rehabilitación individual.
De igual modo, otros futbolistas continúan con su trabajo en manos del readaptador. Kiko Olivas, Joaquín y Javi Sánchez no estarán disponibles para el técnico pucelano. Cabe destacar que el central madrileño arrastra molestias tras el partido de liga frente al Eibar y trabajará al margen del grupo con la intención de llegar al choque frente al Huesca.
Por otro lado, el Real Valladolid cerró su mercado de fichajes en el día de ayer con dos nuevas incorporaciones de última hora. Jota, procedente del Benfica, y Roque Mesa, que llega libre tras desvincularse del Sevilla FC.
En el caso del primero, el equipo blanquivioleta adquiere un jugador eléctrico, joven y rápido que puede dejar muy buenas sensaciones en el club. El futbolista posee las características más comunes para un jugador de ataque: verticalidad, profundidad y encare se fusionan para hacer de Jota un extremo bastante interesante. Respecto a Roque Mesa, Sergio podrá contar con un futbolista de gran calidad en sus filas. Su imagen en el Sevilla FC no fue del todo convencedora para la afición de Nervión pero sin duda es un futbolista capaz de aportar mucha calidad a la sala de máquinas del Real Valladolid. Eso sí, tendrá que trabajar a fondo para hacerse con un puesto en la alineación del equipo castellanoleonés.