Apenas ayer se confirmaban los presagios acerca de un brote de COVID-19 en las filas del Real Madrid. Hoy, las molestias musculares de algunos jugadores hacen temer que la lista de bajas pueda crecer. En virtud de ello, el próximo partido de LaLiga contra el Cádiz tiene todas las características de convertirse en un dolor de cabeza para el técnico Carlo Ancelotti.
Por un lado, están las ausencias de Rodrygo, Bale, Lunin, Marco Asensio, Marcelo y Luka Modrić. Si bien es cierto, el croata ya ha dado negativo en el último PCR y su presencia aún no está del todo descartada, hay tres jugadores más que hoy han entrenado en solitario.
Uno de ellos es Karim Benzema, que se ha ejercitado sobre el césped, pero no con sus compañeros. Aun cuando, durante la redacción de este artículo el francés publicó una foto en sus redes sociales con el mensaje “feel good”, su presencia el domingo no está del todo clara. Por su parte, el lateral derecho Dani Carvajal, del que su entrenador ya había dicho a la salida del partido pasado contra el Atleti que “tenía un poco de sobrecarga en el isquio”, se entrenó en el interior de las instalaciones. A ellos se suma el caso de Mariano, que se quedó con Carvajal en el gimnasio.
Nueve casos, cinco de ellos ‘titularísimos’ en las alineaciones de Carletto no son poca cosa. Si bien es cierto, el desempeño en el camino de espinas que se le presentaba hasta fin de año, después del último parón de selecciones, ha sido notable, no es menos cierto que un ‘patinazo’ en estos momentos puede dar al traste con todo lo alcanzado.