El Real Betis Balompié no levanta cabeza, sigue inmerso en una crisis deportiva, que nos hace presagiar que el cuerpo técnico actual podría tener las horas contadas en Heliópolis. Los de Quique Setién siguen empeñados en una forma de juego que ya todos conocen a la perfección, y ante esto, no propone otra solución que no sea insistir una y otra vez con la misma idea.
El de ayer no iba a ser un partido planteado de forma diferente: posesión bética, y contra realista. El conjunto verdiblanco quiso hacerse con el balón desde el arranque, y llegó a crear más peligro en algunos compases de la primera mitad que lo que creó durante todo el encuentro en Vallecas, por lo que nada nos hacía intuir cómo iba a terminar el encuentro.
Los datos muestran a las claras que el Betis necesita algo diferente, un revulsivo, un plus, porque en un nuevo partido donde acaba con un 65% de posesión, prácticamente doblando la posesión del rival, que solo consigue tener un 35% del tiempo el balón en su poder, la estadística final no puede mostrar que el equipo `txuri-urdin´ haya creado más ocasiones de peligro en las cercanías de Pau López que el equipo verdiblanco en las inmediaciones de Jerónimo Rulli. Dato triste, que por desgracia para el aficionado bético se está haciendo costumbre en esta liga, y es que se está normalizando el acabar doblando al rival de posesión para finalmente no llevarse los tres puntos de vuelta a casa.
La estadística es clara en este aspecto, según indica el compañero @LaLigaenDirecto, el Betis es el 2º equipo que menos ocasiones crea de esta liga (293), solo superado por el Girona (281). El agravante aun es mayor teniendo en cuenta que los de Eusebio Sacristán se han visto inmerso en la lucha por no descender, por lo que el equipo andaluz, solo crea más ocasiones que un equipo que está condenado a luchar por no militar la próxima campaña en la Liga Adelante.