Tras una provechosa cesión a la UD Las Palmas, Robert González vuelve al Real Betis Balompié con el objetivo de asentarse en la primera plantilla. Empezó a destacar enormemente en las categorías inferiores del club, pero al no poder contar con los minutos necesarios para seguir creciendo, buscó una salida que le hiciese madurar tanto personal, como profesionalmente.
Ahí fue cuando entró juego un exbético como Pepe Mel. El técnico decidió apostar por el mediapunta de 19 años, convirtiéndolo en un jugador clave para el conjunto grancanario. A lo largo de la pasada temporada, Robert anotó ocho goles y repartió seis asistencias. Números que le han valido para confirmar el potencial que posee, y para ser tenido en cuenta por Manuel Pellegrini, como mínimo, para la pretemporada.
Ahora, el Real Betis, teniendo que disputar tres competiciones, y ante las dificultades económicas del club para incorporar jugadores, debe aprovechar talentos de la cantera que puedan mejorar la plantilla y que ayuden a cumplir el objetivo de mantener al equipo en competiciones europeas. Por lo que parece que, tras muchos años de espera, por fin ha llegado el momento de ver al chaval debutar en el Benito Villamarín.
Al igual que la gran mayoría de sus compañeros, el merideño regresó de sus vacaciones para someterse a las pruebas médicas rutinarias previas al inicio del trabajo. Posteriormente, ofreció una serie de declaraciones para los medios oficiales del club en los que mostraba su interés por formar parte del equipo: «Vengo con muchas ganas y mucha ilusión de darlo todo, para poder quedarme y formar parte de la primera plantilla. Son tres competiciones, se necesita una plantilla amplia, ojalá pueda formar parte de la plantilla y poder disfrutar aquí muchos más años».
Además, se refirió a su objetivo personal de cara a la próxima temporada: «Mi objetivo es quedarme, afianzarme en el equipo. Que el míster pueda confiar en mí y que se lo demuestre con ganas e ilusión en el campo». A lo que quiso añadir sus sensaciones tras paso por Las Palmas y su crecimiento allí: «Como futbolista y como persona he madurado. Me ha ayudado mucho a crecer y a entender muchas facetas del juego que quizás todavía no había desarrollado. Ha sido un año muy importante para mí», finalizó.
De esta manera, el Real Betis, de la mano de Manuel Pellegrini, sigue aprovechando los jóvenes talentos que surgen de la cantera. Robert tratará de seguir los pasos de jugadores como Fabián, Junior, Loren o Aitor Ruibal. Futbolistas que también llegaron a base de trabajo y sacrificio, teniendo que salir cedidos en alguna ocasión. Asimismo, Edgar, en la misma situación, también tendrá que aprovechar esta pretemporada para convencer al cuerpo técnico y tener sitio en el primer equipo.