José Mourinho, actual entrenador del Tottenham Hotspur FC, donde se encuentra cedido por una temporada el jugador del Real Madrid CF, Gareth Bale, ha optado por rebajar el tono crítico hacia el jugador galés, y se ha enfocado en tratar de recuperarlo para la causa de los Spurs.
Al parecer han quedado atrás aquellas comentadas declaraciones, en donde el entrenador portugués reaccionó a una publicación en Instagram con la que el jugador galés le contradecía en relación con su estado físico al señalar: “Buena sesión la de hoy”. En aquel entonces, Mourinho aludió a la discreción que él consideraba había tenido con el caso del galés para contestar: “Desde el principio de la temporada, en relación a todo lo que rodea este asunto, he intentado ser discreto y mantener las cosas de puertas para adentro, pero creo que ya es el momento de ser claros con lo que está pasando…”.
Después de ese encontronazo a través de los medios de comunicación, Mourinho ha ido modificando el tono con su jugador. Sin llegar a completar ninguno de los partidos después del incidente, sí es cierto que ha participado en todos los encuentros siguientes combinando suplencias con apariciones en el once inicial. En ese período, durante los partidos de la Premier League consiguió los siguiente números: una asistencia desde el banquillo en 45 minutos ante el West Ham, doblete y asistencia ante el Burnley jugando 70 minutos como titular, se fue en blanco con 67 minutos ante el Fulham y cerró con dos goles en 70 minutos frente al Crystal Palace. En la Europa League, fueron dos goles y una asistencia en los dos partidos ante el Wolfsberger.
De acuerdo con palabras del propio Mourinho, después de la victoria ante el Crystal Palace, la fórmula que están aplicando con el galés radica en sacarlo del campo al momento de que empiece a sentir fatiga muscular: «Hemos creído en él y confiado en su capacidad de juicio y de análisis de su cuerpo y sus sensaciones. No queremos que acumule niveles altos de fatiga. Así, entre el minuto 55-60, ya estamos en contacto, contacto visual, tratamos de entendernos. El plan es sacarle del campo cuando sienta los primeros efectos de fatiga muscular. Los jugadores normalmente pueden lidiar con ellos y los hay que terminan los partidos totalmente exhaustos. Pero, en este caso, tenemos que tener cuidado porque le necesitamos. Es tan simple como eso. Nos está dando mucho”.
Mourinho también develó que el otro factor en el que han ido trabajando con Bale es el psicológico, y agregó: “No es que le hayamos reclamado ni nada. Solo le hemos apoyado. Encontré en él cicatrices psicológicas. Cuando estás un par de temporadas con muchas lesiones, lo importante no son solo las cicatrices musculares, sino también las psicológicas, que traen miedo e inestabilidad. Hay un momento cuando estás trabajando bien y en el que todo el mundo a tu alrededor te está apoyando al máximo. En ese momento la barrera psicológica se rompe. Y él lo ha hecho. Ha sido él, no nosotros. Nosotros solo le apoyamos”.
Cierto es que el nivel de los equipos a los que se ha enfrentado el Tottenham, después del famoso desencuentro entre el entrenador portugués y el delantero, no es de los más top exceptuando tal vez al West Ham con quien se encuentra empatado a puntos en la tabla, pero si se trata de recuperar sensaciones, estos son los partidos que le pueden dar confianza al galés y tal vez recobrar una buena parte de aquel jugador que fue, considerando que cuenta con una edad de 31 años, que está dentro del rango donde muchos alcanzan la plenitud futbolística.
Hasta ahora lleva acumulados 1.137 minutos entre todas las competiciones, con diez goles y tres asistencias, a razón de una participación de gol cada 87 minutos. Unos buenos números que deberá seguir manteniendo, y nadie mejor que el galés para demostrar la clase de jugador que es, y dejar a un lado la polémica de las fotos y las redes sociales. De él mismo depende su futuro en los campos de fútbol.