Hace tres años, Brahim Abdelkader Díaz, mejor conocido como Brahim Díaz, viajó a la Serie A. Allá le esperaba el AC Milan, para iniciar una nueva aventura, bajo la figura de una cesión. Una que contó con dos etapas. La primera por una sola campaña y, luego, otra más por dos cursos. Esta última ya ha culminado y, a pesar de los esfuerzos del club italiano para retenerle, el malagueño viene de vuelta al Real Madrid. Un regreso, para quedarse.
En realidad, se trataba de la “crónica de una muerte anunciada”. Con la salida de Marco Asensio, el Real Madrid tenía que cubrir la vacante. Y qué mejor para ello que hacerlo con un jugador que ya estaba en la casa. Además, no hay que olvidar que Brahim Díaz ha experimentado un muy buen crecimiento y desarrollo profesional en Italia.
El malagueño llegó a la entidad merengue en enero del 2019, con apenas diecinueve años, procedente del Manchester City. Al año siguiente emprendió la aventura con el Milan, primero por un año y, luego, con una cesión por dos períodos. En la recién finalizada temporada, 2022/23, sumó siete goles y seis asistencias en 2.685 minutos. Números similares a los de su primer año, donde coleccionó siete dianas y cuatro pases de gol. En total, sumando los tres años de pasantía, fueron dieciocho anotaciones con catorce asistencias, con una buena cantidad de minutos acumulados en sus botines. Para ser más exactos, 6.991 minutos, para un promedio de 2.330 por temporada.
El club emitió un comunicado oficial, donde señala: “El Real Madrid C. F. comunica que el martes 13 de junio, a las 12:00 h en la Ciudad Real Madrid, tendrá lugar el acto de presentación de Brahim Díaz, que regresa como jugador de nuestro club hasta el 30 de junio de 2027, tras su cesión durante tres temporadas en el AC Milan […] A continuación del acto de presentación, Brahim Díaz comparecerá ante los medios de comunicación”.
El centrocampista ambidiestro había estado presente en las noticias, debido al interés de los italianos para conseguir quedarse con sus servicios. De hecho, cuando obtuvieron la cesión por dos años, intentaron incluir una opción de compra obligatoria. Algo que el Real Madrid descartó de plano y que contaba con el beneplácito del propio Brahim que deseaba triunfar en el club dueño de su ficha. Al final todo quedó resuelto y estará de arranque, vestido de merengue, para la temporada 2023/24.