La jornada 25 de LaLiga Santander ha traído consigo un encuentro que ha confirmado la negativa racha de uno de sus equipos, el Athletic de Bilbao. Tras el reciente choque entre el Deportivo Alavés y el Athletic, zanjado con un 2-1 a favor del primero, se hace oficial la consecución de 10 partidos en los que el equipo rojiblanco no consigue la victoria.
Este reciente historial está suponiendo una caída en picado en la clasificación por parte del equipo bilbaíno, que actualmente posee la undécima posición, con un total de 31 puntos. En la rueda de prensa posterior al partido, Gaizka Garitano hacía presente la sensación que actualmente vive en el club: «El trabajo que haces no tiene recompensa y se suma una derrota más, muy cruel de la manera que ha sido en el minuto 91. Ahora son momentos jodidos y difíciles, desde que estoy yo aquí el más difícil».
La plantilla al mando de Garitano no parece encontrar una ventaja clara ni como local ni como visitante, plasmando cuatro derrotas en los últimos cuatro partidos, de las que se reparten dos como local y dos como visitante. Previo a ellos, el equipo vasco obtuvo cinco empates consecutivos en sus partidos ante el Real Madrid, Eibar, Sevilla, Celta y Espanyol. En estos partidos el Athletic no fue capaz de anotar más de un gol, por lo que la sequía goleadora parece ser otro problema a tener en cuenta.
En cualquier caso, el Athletic aún cuenta con una posición de mitad de tabla en liga, que sumado a su actual participación en semifinales de Copa de Rey, no harán decaer los ánimos y la motivación al equipo bilbaíno.