El brote de coronavirus también está dejando huella en las grandes entidades deportivas. La incertidumbre de saber si se retomarán las competiciones está causando grandes problemas en las altas esferas de todos los equipos, ya que tienen que combatir con las enormes pérdidas de ingresos que están por llegar. Muchos clubes están aplicando ERTEs en sus plantillas, pidiendo a los jugadores que renuncien a una parte del sueldo. Y en esto es en lo que está trabajando el Atlético de Madrid. La viabilidad económica del club está en entredicho y desde el seno de la entidad rojiblanca están trabajando en un plan de choque para amortiguar el mazazo económico de la mejor manera.
Miguel Ángel Gil Marín, consejero delegado y máximo accionista del club, ha formado un Comité de dirección con los directores de todas las áreas para ver qué acciones llevarán a cabo durante el periodo de cuarentena para intentar minimizar pérdidas. Una de las medidas que está cogiendo más peso es la reducción de los salarios de jugadores y cuerpo técnico, los sectores del club que se llevan el mayor porcentaje del presupuesto. Ya se han iniciado conversaciones con ambas partes para conocer su disponibilidad, con el objetivo de llegar a un acuerdo que beneficie a todos los implicados.
Asimismo, los más de 500 trabajadores del club que no pueden desempeñar su trabajo con normalidad también se verían afectados por el ERTE, aunque no tendrá impacto en aquellos que están haciendo su trabajo desde casa. La intención de Gil Marín es acercarse al pago total de las nóminas de estos empleados para que el expediente de regulación de empleo temporal les afecte lo menos posible.