Una de las grandes revelaciones de Segunda División ha sido Martín Merquelanz, jugador en propiedad de la Real Sociedad y cedido en la R.C.D Mallorca. Mientras pasa el parón por el COVID-19, el canterano ‘txuriurdi’ ha atendido a los medios de Radio MARCA aclarando que su objetivo es hacerse un hueco en el club donostiarra.
Empezó contando cómo le está yendo el confinamiento: «Estoy en casa, en Irun, tengo la suerte de estar jugando cerca y me dio tiempo a venir. Nos han mandado unos planes para no perder la forma, o perderla lo menos posible, y suelo hacer los ejercicios por la mañana, mientras que por la tarde dedico el tiempo más a descansar, ver alguna película o jugar a la play».
Prosiguió desvelando sus sensaciones encontradas en Miranda del Ebro: «Salir siempre es complicado, pero la vi con buenos ojos, porque la Real tiene una plantilla muy completa. A Miranda vine a tener minutos, continuidad y poder ganarme un puesto de cara al año que viene en la Real, y las cosas de momento han salido bien. Es imposible que me pueda arrepentir de la decisión tomada».
Sorprendido por sus números goleadores, el futbolista español decía: «Nunca he sido un goleador como tal, sino un jugador de banda, que hacía más asistencias que números, pero este año estoy teniendo la suerte de que están entrando».
Hablando sobre su polivalencia y sus minutos en el terreno de juego aclaró: «Eso te lo da la confianza del entrenador y tanto en la izquierda, en la derecha o de media punta, me encuentro cómodo. Yo iba a estar contento jugando, después de estar tanto tiempo parado. ¿La lesión? Fue una situación complicada, no voy a engañar, porque es una lesión larga y a mí me vinieron dos seguidas, pero es un ejemplo de que de todo se sale».
También, narró como fue el enfrentarse a su equipo de toda la vida: «Si te digo la verdad, para nosotros estar ahí era un sueño y no teníamos un rival preferido, viniese quien viniese nos iba a dar igual. ¿Raro la Real? Sí que es raro, porque es el club del que vienes cedido, pero todo el mundo era consciente de que a nosotros nos tocaba ser profesionales y defender la camiseta del Mirandés».
Finalmente, destacó sus ambiciones respecto a la próxima temporada, en su vuelta a San Sebastián: «Yo tengo un año más de contrato con la Real y en julio me plantaré ahí para hacer la pretemporada, luego habrá que decidir si tengo un hueco o no, y yo ganarme un puesto, que nadie tiene nada regalado allí. ¿Mi renovación? No es algo que me preocupe, lo lleva mi agente».
El joven jugador irundarra está viviendo una temporada de ensueño en el Mirandés. No obstante, en su vuelta a la entidad vasca tendrá que hacer frente a la difícil papeleta de competir frente a cuatro jugadores de banda. Por ende, su hueco en la plantilla podría estar como recambio de Odegaard, tanto para repartirse los minutos si el noruego se queda, como para cubrir su plaza si este vuelve al Real Madrid.