Diego López, jugador del RCD Espanyol, ha mantenido una charla telemática para la Federación Gallega de Fútbol junto a Borja Iglesias y otras dos jugadoras, Vero Boquete y Tere Abelleira. En este sentido, el jugador ha tocado una amplia variedad de temas, partiendo de la actualidad del club e incluso atreviéndose a hablar sobre Iker Casillas.
Con la idea de retomar las competiciones, a los clubes les aguardaban muchos inconvenientes y, entre ellos, las lesiones. «Es muy complicado poder retomar en un mes la competición. Habrá muchas lesiones, muchos problemas. Estar dos meses con el trabajo en casa, en un jardín, meterte en un campo de fútbol conlleva muchos riesgos», comentaba el portero gallego.
Así, también se atrevió a tratar sobre cómo el club había sido uno de los más afectados de la pandemia, incluso llegando a acumular seis positivos en plantilla. «Desgraciadamente hemos tenido varios casos de compañeros y gente del cuerpo técnico, muy preocupados. Al principio la información que nos llegaba era incierta y hemos visto lo duro que ha sido, dramático para mucha gente que por desgracia ha fallecido. Nuestros compañeros por suerte están bien y se están reintegrando al trabajo», confesó Diego López.
A día de hoy son varios los entes futbolísticos los que se niegan a competir. A muchos les atañe el cuidado de sus familias, pero Diego no se esconde. «Solo pediría que se vele por nuestra seguridad, por controlar el estado físico de cada jugador y, si se puede, volver a jugar. «Se va a jugar sin público y los que vamos a estar al pie del cañón son futbolistas, entrenadores o fisios. Si se puede volver, pero con seguridad, hay que hacerlo», afirmaba con valentía el guardameta.
El Espanyol es colista de LaLiga a seis puntos de la salvación. No obstante, el club está repleto de guerreros tal y como se ha demostrado a lo largo de este inusual período. «Este parón le ha venido muy bien al equipo para intentar lograr la permanencia. Nos ha dado tiempo a valorar muchas cosas, a ver lo que ha pasado a nivel personal y colectivo. Quedan once finales, es un reto complicado, pero lo lucharemos hasta el final», expresó el lucense, que pese a sus 38 años, es un fijo bajo los palos del RCDE Stadium.
Tras haber pasado por los escalafones inferiores de Valdebebas, Diego llegó a proteger la portería del Real Madrid bajo los mandos de José Mourinho. El luso apostó por él hasta tal punto de que llegó a arrebatarle el puesto a todo un Iker Casillas. Diego López fue un profesional en todo momento y así lo demuestra: “Tengo muy buena relación con Iker Casillas. Ha sido un grandísimo portero”, declaró el cancerbero gallego.
El peso que recae sobre Diego López es enorme actualmente. Son numerosas las críticas que obtiene tanto él como el resto de la plantilla debido a la situación en la que se encuentran. Sin embargo, el portero aún tiene mucha confianza y está perfectamente capacitado para solventar la situación.