El Bayen de Múnich de Flick puede marcar una época. Recuerda al invencible Barça del tiki-taka a quien nadie le podía hacer frente en su gloriosa etapa del sextete. Este año los bávaros ya tienen en sus vitrinas un triplete: Bundesliga, Copa de Alemania y Champions League. Y este equipo aspira a más.
Después de finalizar su tremenda temporada con la victoria en la final de la Copa de Europa, los alemanes siguen demostrando su supremacía en la primera jornada de la Bundesliga. También sabe golear fuera de Lisboa. De esta manera, al igual que el Barcelona, el Schalke 04 sufrió la experiencia dolorosa de encajar hasta la friolera de ocho goles. El planteamiento del Bayern fue el de los últimos tiempos. La pizarra táctica, ideada por Hans-Dieter Flick, consiste en un juego muy directo e incisivo con la defensa ligeramente adelantada y con varios puñales por banda: tanto los laterales como los interiores.
¿Este equipo es invencible?
Pues no, es mortal como el resto de clubes. Sin embargo, hay que remontarse a diciembre de 2019 para recordar la última derrota del Bayern frente al Borussia Mönchengladbach. En este 2020 todavía sigue invicto, con su último empate el 9 de febrero contra el RB Leipzig. Por delante, tiene un calendario apretado. En dos semanas puede obtener dos nuevos títulos: la Supercopa de Europa y la Supercopa de Alemania.
Su próximo rival es el Sevilla FC en la Supercopa de Europa.
¿Cuáles son las opciones de los hispalenses?
Julen Lopetegui previsiblemente salga con su típico 4-3-3 y su clásica presión sobre la zaga rival sin ningún miedo, con un delantero físicamente poderoso de referencia en ataque, ya sea En-Nesyri o De Jong. Aunque, puede que el entrenador sorprenda y se refleje en la táctica de los equipos alemanes que empataron y derrotaron al Bayern. Es decir, con el equipo replegado atrás esperando las embestidas de los bávaros. La disposición ofensiva sevillista consistiría en jugar a contrataques liderados por las galopadas del delantero En-Nesyri y los extremos Ocampos y Suso, frente a los jugadores más flojos del conjunto alemán: los centrales Boateng y Sule.
Irónicamente, ambos clubes han perdido a sus mayores talentos de cara a este encuentro. Thiago, ex del Bayern, ya pertenece al Liverpool y Éver Banega se despidió del Sevilla hace una semana. Aun así, se espera un partido de gran calidad. El Bayern no debería confiarse ante un hexacampeón de Europa League que ya le puso las cosas complicadas en su último enfrentamiento en aquellos cuartos de final de la Champions League.