El Cádiz CF se encuentra desatado tras tantas derrotas y ese estado de ánimo se ha llevado por delante a uno de los canteranos con mayor proyección de los últimos años, Sergio González. Al joven futbolista se le ha dado la baja federativa tras unos días de presión y en los que se le ha prohibido hasta entrenar con sus compañeros. Sergio, a través de su agencia ‘Implica-T’ recibía durante la mañana de hoy miércoles la notificación por parte de LaLiga de un trámite el cual indica que no podrá jugar con su club.
Desde la primera jornada de competición, fuentes cercanas al cartagenero aseguraba que estaba recibiendo presiones para abandonar el club amarillo. Ante la negación del joven, el club de manera unilateral y sin tener en cuenta su opinión contacto con la LFP para darle su baja federativa. El mismo día 28 de septiembre comenzó a iniciarse este trámite. El diario «Marca» ha podido acceder a la carta enviada por la AFE al Cádiz, en la que se acusaba a la entidad andaluza de «incumplimiento del contrato suscrito con el futbolista, y de los derechos de los jugadores previstos en el Estatuto de los Trabajadores, en el art. 7.4 del Real Decreto 1006/1985, por el que regula la relación laboral de los deportistas profesionales», denuncia la cual ha puesto la AFE al club.
La AFE, dirigida al Director Deportivo, muestra «la total disconformidad y preocupación por las decisiones adoptadas y el trato dispensado por el CÁDIZ CLUB DE FÚTBOL» ,y exige, como se puede observar, una solución. Por el contrario, la asociación amenaza con ejercer todas las medidas legales y federativas que protegen al futbolista.
Tan solko faltan cinco días para que el mercado cierre, de ahí que las decisiones que se tomen sean cada vez más drásticas. Sin embargo, la situación es, cuanto menos, extraña al tratarse de un jugador que, a priori, ha dado todo por el Cádiz. Desde el entorno del futbolista es totalmente un desconcierto, desconociendo de esta forma por qué se han llegado a tomar estas decisiones tan radicales y que nunca se habían visto. Además, es una situación límite como sucede con la salida de Edu Ramos que, según el club, sigue entrenando, pero al que se le rescindirá el contrato el día 5 si no se llega a un acuerdo.