El Elche ha sido el gran animador del cierre del mercado, inscribiendo casi en la bocina a Emiliano Rigoni, un extremo derecho procedente del Zenit de San Petersburgo. El argentino es jugador con llegada, al estilo Tete Morente, que servirá para introducir mayor competencia en la zona ofensiva.
El jugador se ha pasado los últimos años a sueldo del Zenit, pero con dos cesiones en Sampdoria y Atalanta, donde jugó a cuentagotas. Su mejor temporada es antes de su salto a Europa, en las filas de Independiente (2016/17) en la que logró 10 goles en 29 partidos. Desde entonces, la irregularidad ha sido parte de su perfil como deportista.
Formado en las categorías de Belgrano, debutó como profesional en 2013. No tardó en destacar y tres años más tarde, el ‘Rojo’ lo compraría por algo más de 1,5 millones de euros. Solo duró un año en Independiente, ya que el Zenit vino y lo fichó por 9 millones de euros, seis veces más de lo que los de Avellaneda habían pagado a Belgrano.
En total acumula más de 200 partidos en nueve temporadas como futbolista profesional, en las que ha anotado 46 goles. Empezó su carrera en Belgrano, de ahí ficho por Independiente donde coincidió con Sánchez Miño una temporada.
Curiosamente, la pasada temporada visitó el Martínez Valero en un amistoso organizado entre el Elche y el Zenit.