La pandemia ha generado un período de incertidumbre en todo el mundo. El fútbol no ha quedado al margen y los clubes atraviesan una mala situación económica. Sin embargo, los seguidores de cada equipo han vuelto a demostrar fidelidad. Ese es el caso de Osasuna, que ha hecho historia y ha batido su récord particular de abonados a pesar de toda esta crisis.
Esto solo es una muestra más de que el fútbol no es solo un deporte. El fútbol mueve corazones y despierta sentimientos que van más allá del entretenimiento. Cuando más se necesita a los aficionados, ellos responden. El mercado estival ha sido largo y complicado debido a que las arcas de las entidades deportivas no se encontraban en su mejor momento. Por eso, la ayuda que demuestran los más fieles siempre es un plus para afrontar la nueva temporada.
No se puede acudir a los estadios, por el momento, pero eso no ha sido excusa para la gente, que ha seguido renovando su abono o dándose de alta. Este martes, el conjunto rojillo llegó a los 20.465 socios. Un bonito número para hacer historia justamente en el año del centenario, ese que no van a poder celebrar de la forma deseada.
Según informó el propio club, la cifra más alta hasta el momento estaba en los 16.803, que se lograron en la campaña 1980/81 tras lograr el ascenso a Primera División. Por lo tanto, han sido casi 4.000 personas más las que se han sumado al sentimiento osasunista. Asimismo, el conjunto navarro no tramita más nuevas altas de socio ya que se ha completado el cupo máximo de nuevo aforo de El Sadar.
Uno de los protagonistas que ha demostrado su orgullo con esta cifra ha sido el propio presidente, Luis Sabalza: «No tengo palabras para definir a la afición de Osasuna. Cuando a uno le parece que ya nada puede sorprenderle, esta afición siempre lo consigue«. Ahora solo queda esperar para ver esas caras de ilusión en las gradas, pero a los más enamorados no hay quien los pare, pues ahí está el récord.