En la reunión que recientemente aconteció en La Moncloa, Iñigo Urkullu y el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, debatieron sobre varios temas propuestos sobre la mesa. Tras unas horas reunidos, el lehendakari logró conseguir ese compromiso de Sánchez para abordar una importante negociación con Euskadi sobre la futura posible selección, tras el registro que el Gobierno autonómico de la ciudad vasca llevó a cabo en los organismos de FIFA y UEFA, para la creación de una selección nacional propia alternativa a la española.
El Gobierno vasco, mediante sus grupos de líderes políticos PNV y PSE-EE, avalan la petición exigida a los dos organismos más importantes del mundo del fútbol, para poder formalizar e instaurar en el panorama de combinados nacionales a una selección exclusiva de futbolistas vascos. Jon Redondo, como director vasco de Deportes, fue el que acudió junto a miembros de la federación a Zúrich y Nyon, como principales sedes, para registrar un informe con esta petición.
Algo parecido pasó en su día con la Selección catalana de fútbol cuando no fue aceptada como miembro de la FIFA ni del COI. Esto provocó que el combinado que entrena Gerard López en la actualidad, no pudiera ni puede participar en encuentros oficiales y solo disputa amistosos salvo sus categorías inferiores que desde 1999 disputan la Copa de Regiones de la UEFA.
Al parecer, distintas opiniones de los Portavoces de la RFEF desecharon esta vía de solución. Pocas semanas después dio un importante giro en cuanto a las posibilidades de que la decisión prosperase, en el momento en el que Sánchez se mostró comprometido a escuchar la propuesta de Euskadi que veremos a ver como finaliza.