Se disputó en Old Trafford el partido que enfrentaba a Manchester United y Everton correspondiente a la jornada 23 de la Premier League. Un partido loco que en líneas generales dominó el Manchester United, pero un arreón del Everton empató el encuentro en la segunda parte, para que después de volverse a adelantar Calvert Lewin le arrebatara la victoria en el último segundo a los locales.
Manchester United: De Gea, Maguire, Lindelöf, Shaw, Wan-Bissaka, Pogba (Fred, min.39), Mctominay, Bruno Fernandes, Rashford, Greenwood (Tuanzebe, min.93) y Cavani.
Volvía Pogba al 11 tras rotar frente al “Soton”
Everton: Olsen, Godfrey, Keane, Digne, Holgate, Davies (Iwobi, min.75), Gomes, Doucoure (King, min.81), James (Sigurdsson, min.69), Richarlison y Calvert-Lewin
James, Godfrey y Davies serían las novedades en el 11 del Everton
PRIMERA PARTE: La orquesta de Bruno
El partido comenzó en el Teatro de los Sueños, dos equipos llenos de calidad y con aspiraciones similares se enfrentaban con el objetivo de llevarse 3 puntos clave en la temporada. Los “Toffees” tomaron la iniciativa en los primeros 15 minutos, la posesión era totalmente suya, inclinando el campo sobre la banda izquierda de Digne, que colgó varios balones que no encontraron un receptor. Tras 15 minutos sin grandes emociones la cosa se empezó a poner interesante, el United tomó el control, y Bruno Fernandes se encargó de mover el balón de lado a lado, hasta que un centro suyo encontró a Cavani que remató un cabezazo imparable para Olsen, 1-0.
Las cosas le estaban saliendo muy bien a los locales, el Everton no era capaz de general acciones de ataque, y el dominio de los de Solskjaer era total. A pesar de tener la mayor parte de la posesión, y tener a raya a su rival, el United no encontraba la manera de hacer daño a los de Ancelotti, hasta que llegó Bruno Fernandes para agitar su varita. Fue en una jugada sin aparente peligro donde el portugués disparó un misil que subió y después bajó para colarse en la meta de Olsen, marcando un golazo digno de crack. Este tanto supondría el 2-0, poniendo tierra de por medio en el marcador, y en un partido donde solo había un color.
A pesar de los pocos minutos que restaban, el Everton lo intentó por última vez al filo del descanso, James con un gran pase entre los centrales dejó solo a Calvert Lewin, que falló el mano a mano frente a De Gea, enviando el balón rozando el palo.
SEGUNDA PARTE: Revolución “Toffee”
La segunda parte daría comienzo en Manchester, y Ancelotti había conseguido convencer a los suyos, nada más comenzar, Davies filtró un excelente pase Calvert Lewin, que centró con dificultad, pero un falló de De Gea al palmear el envío permitió a Doucouré acortar el resultado y meter de nuevo al Everton en el partido. No pasaría más de 2 minutos, cuando en el 52 los visitantes volverían a golpear y James sería el indicado de finalizar un buen centro con una volea precisa a la esquina de la red, imposible para De Gea, que veía como en 2 minutos había encajado dos goles clave para el devenir del partido. 2-2, las tablas volverían al electrónico.
Despertó tarde el United, dos goles necesitaron encajar para volver a hacerse con el control del partido. En el minuto 62 Rashford tendría una de las ocasiones más claras del partido, Olsen le paró un mano a mano al inglés, que a pesar de estar algo escorado tenía intenciones claras de gol, por lo que la parada del sueco fue importantísima. A balón parado llegaría el gol que volvería a poner al United por delante, centro medido de Shaw al punto de penalti que remataría McTominay al fondo de la red, un gol que podría ser definitivo, un tanto que hundía más al Everton que se sentía incapaz de volver a remontar.
Parecía que los 3 puntos se quedarían en casa, Rashford y Bruno tuvieron alguna ocasión más, que lamentarían en el último minuto tras suceder lo inesperado. La úlima oportunidad para el Everton sería con una falta desde el medio campo, Olsen subía a rematar a la desesperada, y quien, si no encontraría el premio, Calvert Lewin aprovechó un balón muerto que le dio un empate agónico a su equipo, que le permitirá seguir peleando por puestos europeos.