El imperecedero guardameta nazarí con instinto goleador

Actualmente estamos viviendo una época en la que cada vez son más los porteros que suben a rematar un córner, lanzan penaltis o incluso libres directos, por ejemplo: los famosos penaltis de Dimitrovic (SD Eibar) o los goles en córneres este fin de semana pasado de Bono (Sevilla FC) y Dani Rebollo (Betis Deportivo). El fútbol mundial está sumergido en una «burbuja revolucionaria» a lo que algunos expertos llaman fútbol moderno, y con ella, la posición de portero se está viendo involucrada.

Antiguamente era muy difícil de tener la suerte de poder presenciar un gol de un cancerbero. Ya sea por que no estaba muy bien visto que un entrenador permitiese dejar subir a rematar o lanzar cualquier jugada a balón parado a un guardameta, o por lo que podía suponer correr ese riesgo al equipo y al propio cargo del míster. No obstante, hubo goles de porteros que serán siempre recordados en la memoria del fútbol como fue Antonio Olivares «Pancho», con una entrega total al fútbol, así podemos resumir la vida del protagonista y exrojiblanco en el día de hoy.

TRAYECTORIA FUTBOLÍSTICA:

En la década de los 60 recaló un gran guardameta en las filas del Granada CF. Fueron varios los clubes por los que pasó la gloria nazarí hasta fichar por el combinado rojiblanco. Una joven promesa del fútbol andaluz que firmó en primer lugar por el Real Madrid CF en sus inicios en la élite del balompié, allá por la temporada 1958/59 y que, posteriormente, fue cedido.

Llegó al Granada CF en 1964, en calidad de cedido, cuando el equipo militaba en Segunda División. En esta temporada jugó ocho partidos, siete de ellos como titular. La segunda temporada que disputó con el conjunto nazarí sería la del ascenso a Primera División, en la 1965/66. No logró la titularidad y jugó cuatro partidos de esa temporada. Con la llegada a Primera División comenzó la que sería su última campaña como rojiblanco entre 1966 y 1967, donde tan solo jugó tres partidos.

Más tarde, fichó por el CD Alcoyano, donde logró la titularidad y se convirtió en la figura del club de la Font Roja. Finalmente dejó el fútbol en el Villena, tras un breve paso por el Elche CF y el CD Linares.

ANÉCDOTA CON LA ELÁSTICA ROJIBLANCA:

El jugador que pasó por las filas del Granada CF como portero, destacaba por su excelente posición bajo los palos, su alto porcentaje de parar penaltis y por su olfato goleador, aunque suene raro. Hablamos de Antonio Olivares «Pancho» cómo si de un héroe se tratase y así fue para el cuadro rojiblanco en la Copa Sánchez Pizjuán 1964/65.

La Real Federación Andaluza de Fútbol, con motivo del fallecimiento en 1956 de Ramón Sánchez Pizjuán (mítico presidente del Sevilla FC), decidió organizar una competición llamada Copa Sánchez Pizjuán. En ella participaron los distintos equipos andaluces de las tres principales categorías. Duró 12 años. Este torneo, que se jugaba una vez finalizada la temporada regular, lo disputó el Granada CF durante dos temporadas (1964/65 y 1965/66).

En su primera participación, el conjunto granadino se enfrentó en la primera eliminatoria al Priego CF, el cual tenía que defender un 2-0 en la vuelta. Este partido de vuelta, que acabó con empate a tres goles en el luminoso y, como consecuencia, le dio el paso a la siguiente ronda de la Copa Sánchez Pizjuán al Granada CF. Es aquí cuando ocurre el hecho del que hoy os queremos hablar.

Olivares cambió la portería por la delantera en este mítico encuentro. El cuadro nazarí tuvo que jugar el día de antes un amistoso frente al Málaga CF y, como habían pasado pocas horas, el entrenador Francisco Antúnez se las deseó para hacer un XI competitivo. Es entonces cuando se produce la gran anécdota.

«El pimpante extremo izquierdo» marcó dos goles, pese a que su puesto en el equipo no era precisamente la delantera, sino el punto contrario. El segundo guardameta tuvo que alinearse de ‘clá’ al faltar elementos en el equipo.

Lo llamamos Olivares porque con ese nombre actuó en ese choque ante el Priego CF. Pero cuando lo hacía bajo los palos era «Pancho» el que portaba en la camiseta y con el que los aficionados rojiblancos lo recuerdan.

TRAYECTORIA COMO ENTRENADOR:

Tras fijar su residencia en Sax, se incorpora como entrenador del Sax CF. En la temporada 1978/79, donde consigue el anhelado ascenso a Primera Regional. Dentro del club sajeño ocupó todos los cargos posibles: entrenador, secretario técnico, preparador físico y de porteros, delegado, etc.

En varias ocasiones fue entrenador del juvenil sajeño, donde cabe destacar los ascensos logrados en las temporadas 1986/87 y 2000/01. Además fue entrenador de equipos de fútbol sala en la zona de Alicante.

Antonio Olivares falleció en 2019 y con este artículo hemos querido desde InformaFútbol recordar a un portero que, por un día, dejó de usar los guantes para convertirse en killer. Y también dejar constancia de que el Granada CF está cargado de grandes anécdotas. No olvidéis nunca que «en Graná to’ es posible».