Crónica| Georgia 1-2 España: Una victoria para encarrilar la clasificatoria

Este 28 de marzo, Domingo de Ramos, se enfrentaban las selecciones de Georgia y España en busca de los tres puntos, tras un inicio de ronda clasificatoria desafortunado por parte de ambos conjuntos. El partido tuvo lugar a las 18h en el Dinamo Arena y acabó con una victoria visitante.

Los locales planteaban un esquema 1-4-2-3-1 con Loria bajo los palos; defensa compuesta por Giorbelidze, Dvali, Kashia y Kakabadze; centro del campo con Gvilia, Kankava, Kvaratskhel, Lobzhanidze y Kiteishvili; en punta salía Zivzivadze.

Por su parte, el equipo español, salía con un esquema 1-4-3-3 con Simón en portería; defensa de cuatro con Jordi Alba, Llorente, García y Pedro Porro; centro del campo con Pedri, Busquets y Fabián; en el ataque partían Bryan Gil, Morata y Ferrán Torres.

El partido comenzaba con el dominio del balón esperado por parte de ‘La Roja’ pero con poca verticalidad. Aún así, en el 10’ y tras un rechace de la defensa georgiana, el conjunto visitante tuvo una buena ocasión para adelantarse. La selección local se limitaba, por su parte, a replegar en defensa y salir a la contra en cuanto tuvieran la posesión de la pelota.

De hecho, fruto de una de ellas, consiguieron poner en aprietos a la defensa española tras un buen saque de córner. El delantero georgiano consiguió rematar de cabeza, pero Simón atajó con una gran parada. Con el paso de los minutos, la posesión caía cada vez más del lado español, pero no se les veía incómodos a los locales sin la pelota.

Llegados casi al descanso, España consiguió crear una ocasión con cierto peligro, pero Ferrán la envió por encima del travesaño. No obstante, en el 43’, Georgia consiguió anotar el 1-0 por medio de Kvaratskhelia tras una mala acción defensiva española. Así, sin apenas juego, pero con mucha efectividad, los locales se iban al descanso venciendo.

La reanudación nos traía una España con cambios en sus filas, pero con la misma filosofía. Tras mucho insistir, en el 55’, Ferrán Torres conseguía igualar el encuentro y poner el 1-1 en el marcador. A raíz del gol, Georgia intentó atacar más y salir jugando desde atrás pero el dominio español era cada vez mayor.

Poco a poco se fue disolviendo el ataque español y se equilibró el encuentro hasta volver a la tónica gris de la primera parte. Un equipo poco efectivo frente a otro contento con el empate, la mezcla perfecta para el reparto de puntos. Sin embargo, en los cuatro minutos de añadido, consiguió Dani Olmo dar un golpe de efecto y marcar el 1-2 que le daba los tres puntos a España.

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