La RFEF, con Luis Rubiales a la cabeza, alcanzó el pasado 2019 un acuerdo con Arabia Saudí para disputar la Supercopa de España durante tres ediciones en el país asiático. Así pues, dicho acuerdo habría sido incrementando hasta 2029, con el fin de obtener un buen montante económico, a cambio de mantener el traslado de dicha competición a Oriente Medio.
Por lo tanto, a falta de anuncio oficial, la Supercopa de España se seguiría disputando en Arabia Saudí hasta 2029, tras la renovación por tres años más del contrato actual, junto a una prórroga de cuatro ediciones más, según ha anunciado 2Playbook.
Un negocio redondo para la federación que le permitiría hacer frente a las deudas y desbarajustes económicos originados por el COVID-19, puesto que durante las próximas ocho campañas percibirían una cifra que oscilaría entre los 240 y 320 millones de euros.
El impacto económico causado por la pandemia mundial ha causado estragos a toda la población, incluido autónomos, empresas u organizaciones, como la RFEF, que ha hallado en el traslado de la Supercopa a Arabia Saudí un salvoconducto que le posibilite remitir dichas deficiencias causadas. Noticia positiva para las arcas económicas de la federación, pero negativas para el aficionado, el verdadero motor del fútbol.