Iker Casillas volvió a ser protagonista en el día de ayer estrenando su documental ‘Colgar las Alas’ donde repasa toda su trayectoria futbolística. Dos capítulos que trataron temas importantes como el infarto que sufrió hace un año y que provocó su retirada y sus inicios en el Real Madrid como el debut liguero en San Mamés.
A sus 39 años, Casillas es una leyenda del fútbol español. Su retirada el pasado 4 de agosto dejó una extensa trayectoria e innumerables trofeos a sus espaldas. ‘Movistar Plus’ ha sido la encargada de sacar a la luz el testimonio de Iker aquel fatídico 1 de mayo del 2019.
«Ese día hice lo que hacía todos los días. Salimos a entrenar y tenemos la costumbre de dar dos vueltas al campo. Tengo la sensación durante medio segundo como que te sabe diferente cuando intento coger aire. Me noto que me falta el aire. En mi cabeza pienso que es alergia. Luego empiezo a tener otra sensación, que se me oprime el pecho y noto que no puedo respirar. Me tumbo en el suelo y digo que no puedo. Es como estar en una piscina de dos metros, estás en el fondo, quieres salir y no puedes«, comentó el meta de Móstoles.
«Era una angustia. Cada vez me faltaba más el aire. Cuando íbamos camino del hospital siempre pensé que era algo de la alergia, no pensé que iba a derivar en un infarto. Pregunté a la doctora si me iban a abrir el pecho. Noté el catéter hasta mi pecho y notas como una hormiguita. Hay un momento difícil cuando me metieron el líquido de contraste y le decía al doctor que no aguantaba, que me estaba quemando, pero el doctor me tranquilizó y me dijo que tenía que aguantar 30 segundos», añadió.
Su mujer, Sara Carbonero, también recordó aquel día con angustia: «Cogí el teléfono y lo llamé, no sé por qué lo hice porque era muy probable que no me respondiera. Ni el médico, ni Sandro Pereira -seguridad del equipo, y era raro porque Sandro siempre responde. Cuando iba a subir al avión me llamó Iker, con la voz débil, pero me tranquilizó», afirma.
Casillas víctima del miedo
El miedo se apoderó del exportero del Real Madrid, llegando a temer por su vida: «Si me pasa el día anterior en mi casa, seguramente me habría quedado en el sitio. Jamás he vuelto a dormir boca abajo. Las noches las pasas con angustia y hasta un estornudo es un drama. El doctor me decía, Iker, no te vas a morir”, a lo que continua: “Hubo un día que ya de la angustia que tenía, dije: ‘mira, me voy a dormir, y si no me despierto pues no me despierto, pero voy a intentar descansar», admitió.
Recuperación complicada
Casillas también habló de su recuperación y de lo complicado que fue: «Recuerdo salir a pasear una semana después por recomendación del médico donde me dijo que sólo estuviera diez minutos. Yo le dije que no tenía para empezar con eso. Pero me cansé mucho y llegué desanimado a casa. Te ves débil, flojo. Te ves desprotegido. Me acuerdo que fui a Madrid con el doctor Serratosa y en una sesión de recuperación, cuando me tocó hacer un ejercicio simple de fuerza, lo pasé fatal. Tenía una sensación de resentimiento por dentro descomunal«, afirmó.
Debut liguero en San Mamés
En el segundo capítulo, Iker rememoró sus inicios en el Real Madrid donde Toshack le dio la oportunidad con 18 años: «Estábamos los dos solos en el autobús, se me acerca a mí, me pregunta por cómo estoy y me dice que mañana voy a jugar en San Mamés. 18 años en esa portería lo hace poca gente. ¿Qué hago yo jugando contra esta gente? Yo lo viví como si estuviera en un sueño», concluyó.
Iker narra así el peor año de su vida en un documental disponible en Movistar Plus, donde todavía restan un total de cuatro capítulos.