Abdelahk Nouri, en el verano de 2017, enmudecía al mundo del fútbol. La promesa del Ajax caía desplomado en el césped durante un amistoso en Austria, frente al Werder Bremen. Tiempo después, desde el club holandés confirmaban una de las noticias más amargas en la historia del fútbol, Nouri sufría un daño cerebral grave y permanente. Por lo tanto, el joven holandés entraba en coma. Esta semana, casi tres años después, la familia del jugador ha informado de que ha despertado, siendo su situación mucho más esperanzadora.
La evolución contada por su familia
Desde aquel fatídico día, el mundo del fútbol se ha volcado con Abdelahk Nouri al cien por cien. El joven holandés compartió vestuarios con jugadores de la talla de Frenkie de Jong, Matthijs de Ligt o Van de Beek. Estos, a pesar de haber triunfado, nunca se han olvidado de él, afirmando incluso de Jong que «cuando le dije que iría al FC Barcelona me alzó la ceja«. Futbolistas de otros países como Ousmane Dembélé, aprovecharon para regalar camisetas o hacerles un homenaje a Nouri.
Tras tres años, su familia seguía aferrándose a la esperanza y, al fin, despertó. Tal y como contaba su hermano en una entrevista, «Desde que está en casa está mucho mejor que en el hospital. Es consciente de dónde está, se encuentra en un entorno familiar«. Además, ha querido añadir que en sus mejores días incluso se comunica a través de un gesto con la ceja o una simple sonrisa.